“Para padre Bergoglio era una cosa que ya estaba desde hace tiempo en su corazón”, entrevista a Miguel Yañez S.I.
ROMA (Aleteia.org). Papa Francisco ha dado un nuevo impulso a la Iglesia en su opción preferencial por los pobres. La primera Exhortación Apostólica del Pontífice, Evangelii Gaudium, así lo confirma.
Aleteia.org ha entrevistado a padre Miguel Yáñez, S.I., director del departamento de Teología Moral de la Facultad de Teología, quien propone el tema de la opción cristiana por los pobres en una mesa redonda interdisciplinar organizada el martes 14 de enero por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma.
La palabra “pobres” aparece alrededor de 62 veces en la Evangelii Gaudium ¿Es éste documento una prueba más de la preocupación del Pontífice de que la Iglesia Católica no se aleje del camino de los necesitados?
«Yo conozco personalmente a papa Francisco. El tema no es nuevo en padre Bergoglio, he visto como ha vivido muy cerca de los pobres dejándose interpretar por la realidad de tantas personas. Recuerdo que él, cuando era provincial (en Buenos Aíres), trasladó su residencia desde el centro de la ciudad a la periferia».
¿Recuerda otro episodio sobre la preocupación de papa Francisco por los pobres?
«En el Colegio en San Miguel me contó (Bergoglio) que una vez estando allí en la recepción llega una señora muy pobre y le pide ayuda porque no tenía como darle de comer a sus cinco hijos, su marido estaba sin trabajo. Me contó que quedo muy impresionado por el caso de esa mujer.
Yo estaba terminando mi noviciado cerca del Colegio Máximo, donde él vivía, y faltaban pocos meses para mi traslado, entonces me llamó por teléfono y me pidió que fuera a la casa de esa mujer para conocer de cerca cual era la situación.
A partir de allí comenzamos una ayuda integral que después generó una amistad con esa familia. Y este es nada más que el comienzo para mí, pero creo que para él era una cosa que ya estaba desde hace mucho tiempo en su corazón».
El Papa pide a la Iglesia de escuchar el grito de los pobres para liberarlos y promoverlos. Esto tiene un olor a teología de la liberación ¿Debemos privilegiar a los pobres sobre los ricos?
«Ese es un tema que ya la teología de la liberación había desarrollado de una manera pionera, si bien, alguna corriente lo hizo siguiendo categorías del marxismo.
El padre Bergoglio fue siempre reacio a las categorías marxistas que se incorporaban directa o indirectamente en la teología de la liberación. No toda la teología de la liberación, pero sí una parte. Él en cambio nos hizo tomar contacto con la realidad. El pobre es una persona.
Yo encuentro en el documento de Aparecida, casi seguramente un influjo de su pensamiento, cuando dice: “tenemos que hacernos amigos de los pobres”.
Es decir, no se trata de una idealización del pobre. Todos podemos ser pobres. Se trata en cambio de una situación objetiva, el pobre debe ser privilegiado por su condición. Porque naturalmente tendemos a privilegiarnos a nosotros mismos, cada uno se privilegia a sí mismo. Y en la sociedad, lógicamente, el fuerte tiene el privilegio debido a que tiene dinero o una posición de poder».
El papa nos invita a ir a las periferias existenciales…
«El Papa nos manda a ir a las periferias para percibir cual es realmente la situación objetiva de quien es más débil, de quien se encuentra en una situación de desventaja. Comprender la justicia desde la periferia significa privilegiar al débil, al que está en desventaja, de hecho porque ya se encuentra en una posición injusta».
Los ricos tienen una responsabilidad ante la sociedad, sin embargo contraponer ricos y pobres es peligroso. Al respecto, Juan Pablo II afirmaba que “la contraposición, en cambio, es entre los ricos frente al mundo y los ricos frente a Dios”. ¿Qué ha cambiado con papa Francisco al respecto?
«Pienso que en este sentido no ha cambiado nada. Él no hace más que continuar con esta tradición de la Iglesia que arranca de la Sagrada Escritura, a veces no siempre nos dejamos interpretar por ella. Hay un mensaje muy fuerte tanto en el antiguo como en el nuevo testamento que es integral».
Entonces, ¿Cuál es el problema en la interpretación de esta contraposición entre ricos y pobres?
«En ocasiones el problema es de entender esto desde las ideologías; sea quienes han hecho la opción por los pobres interpretando esta acción contra el rico, sea quienes interpretan ideológicamente la Iglesia de los pobres contra la Iglesia jerárquica. Existen también aquellos que a través de otra ideología no quieren ver a la pobreza.
La propuesta de papa Francisco, como de la Iglesia, por ejemplo a través de la patrística, es dejarnos interpelar de una situación que es real, y de la cual nosotros no podemos pasar de largo como el sacerdote y el levita de la parábola del buen samaritano».
Para consultar las demás entregas del especial:
Primera parte (15.01.2014)
Segunda parte (20.01.2014)
Tercera parte (24.01.2014)