Hacen pública una carta de respuesta del Papa a los seminaristas de la isla caribeña
“Pilares de la formación: una vida espiritual intensa y constante, una preparación intelectual seria, una experiencia comunitaria y de fraternidad, y la actividad apostólica”.
Se ha dado a conocer una carta, enviada por el Papa Francisco el pasado 15 de abril, a los seminaristas de Cuba, en la que, entre otras cosas, les advierte de que el sacerdocio no es “un oficio”, sino que consiste “en llevar a Cristo en el corazón para poder ofrecerlo sin reservas a los demás”.
Texto íntegro de la carta del Papa
Queridos seminaristas: Agradezco mucho la carta que me han enviado, haciéndome partícipe de la ilusión de afianzar el llamado de Dios para llegar a ser buenos sacerdotes al servicio del santo pueblo de Dios en Cuba. Háganlo con alegría, con constancia, con humildad. No se trata de aprender un «oficio», sino de llevar a Cristo en el corazón para poderlo ofrecer sin reservas a los demás, especialmente a quienes más lo necesitan. Ésta es una tarea apasionante que bien vale toda una vida.
También los invito a seguir fielmente las orientaciones de los formadores. Ellos saben muy bien la importancia decisiva que tiene, para el seminarista, una vida espiritual intensa y constante, una preparación intelectual seria, una experiencia comunitaria y de fraternidad, y la actividad apostólica. Estos son los pilares, que interactúan y se complementan entre sí, sobre los que se funda la vida del seminario. Les pido por favor que no dejen de rezar por mí y por los frutos de mi servicio a la Iglesia. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide.
Fraternalmente
Franciscus Vaticano, 15 de abril de 2014