El Mensaje final de la III Asamblea de los Obispos ha sido dirigido especialmente a las familias cristianasLos Obispos y el Papa Francisco han aprobado un Mensaje dirigido a “todas las familias de los distintos continentes y en particular a aquellas que siguen a Cristo”. El Mensaje ha sido divulgado en ocasión del Sínodo (5-19 octubre 2014) sobre la familia y definido después de la decimocuarta Congregación General realizada este sábado en el Vaticano.
Es un documento que se distingue de la ‘Relatio Synodi’ (acta final de los trabajos del Sínodo) por su Mensaje directo a los fieles. Precisamente, el Cardenal Gianfranco Ravasi ha explicado en la Conferencia de Prensa de Presentación del Mensaje de la III Asamblea que la futura Relatio será un documento más teológico.
El cardenal italiano, también Presidente de la Comisión para el Mensaje ha confirmado que es un texto que se une al “discurso de consolación y exhortación” del evangelio de la Familia. Consideró que “da respiro a las dificultades de la familia contemporánea”, pero también hace sobresalir “la belleza de la familia”.
Por su parte, el cardenal Raymundo Damasceno Assis (Brasil), Presidente Delegado del Sínodo ha confirmado que el Mensaje y el próximo documento “Relatio Synodi” hacen parte de un proceso que concluirá en 2015. A las preguntas de los periodistas ha asegurado que sólo hasta el próximo año se podrá tener una respuesta pastoral a las situaciones irregulares de “los divorciados y vueltos a casar” y los “homosexuales", entre otros temas.
Iglesia casa de puertas abiertas
En este sentido, los Padres sinodales confirman que la Iglesia es una “casa con la puerta siempre abierta, recibiendo a todos sin excluir a nadie”. Asimismo, agradecieron a los “pastores, a los fieles y a las comunidades dispuestos a acompañar y a hacerse cargo de las heridas interiores y sociales de los matrimonios y de las familias”.
Los obispos en el documento aprobado casi a la unanimidad (14 Padres sinodales se abstuvieron de votarlo) exponen su cercanía a las familias. “Nosotros, pastores de la Iglesia, también nacimos y crecimos en familias con las más diversas historias y desafíos” escribieron.
El texto de tres páginas ha sido leído para su aprobación en el Aula del Sínodo por los cardenales Gianfranco Ravasi y Raymundo Damasceno Assis, respectivamente presidente de la Comisión para el Mensaje y el presidente delegado, junto al secretario del eje, monseñor. Bruno Forte. Después de las correcciones o mejoras ha sido aprobado esta mañana y presentado a la prensa en la tarde.
El silencio del Papa Francisco para no interferir en el debate
El cardenal Ravasi habló sobre el silencio intencional del Papa Francisco durante la mayor parte de los trabajos del Sínodo. “El silencio del papa es fundamental para el camino sinodal (juntos)” indicó. El Papa “intervino al inició pero luego hizo silencio para no romper el hilo del debate y el diálogo”. “Naturalmente hablará más adelante” añadió risueño.
Sobre los distintos pasos de elaboración del documento, el cardenal Ravasi sostuvo que la Relatio Synodi es un documento que recoge las voces de la Relatio post disceptationem, un documento que indicó como boceto libre de intervenciones y los resultados de los Círculos menores, que en cambio tuvieron un trabajo más articulado y definido. Por ello, “la elaboración del texto es más coral”. Es un “texto abierto” porque sabemos que “esta es una primera etapa”.
El paso sucesivo es la publicación de la “Relatio Synodi”. Precisamente, el portavoz de la Oficina de prensa del Vaticano, padre Federico Lombardi ha ilustrado que durante la 14º congregación general del Sínodo se ha presentado el borrador del "Relatio Synodi" que será votado por los 191 Padres sinodales el sábado en la tarde.
La luz del amor
El Mensaje de la III Asamblea está escrito para dar esperanza a las familias. Se habla de la luz “nupcial de los cónyuges”, del “itinerario autentico que comienza en el noviazgo”. Se insiste en el sacramento del matrimonio, donde Dios pone su “gracia”. Además, del amor y su difusión en la “fecundidad”. Por ende, “las familias que viven esta aventura luminosa se convierten en un testimonio para todos, en particular para los jóvenes”.
Así, la Asamblea ha manifestado “admiración” y “gratitud” a las familias cristiana por “el testimonio cotidiano che ofrecen a la Iglesia y al mundo con su fidelidad, su fe, su esperanza y su amor”.
“Nuestro diálogo durante los días del Sínodo nos ha enriquecido recíprocamente, ayudándonos a contemplar toda la realidad viva y compleja de las familias” aseguran.
Desafíos para la familia
Posteriormente, el texto presenta los desafíos que dividen y ponen a prueba las familias de hoy: probreza, enfermedades, violencia familiar, soledad, marginación. Al respecto, “ante todo, está el desafío de la fidelidad en el amor conyugal”, además se pone atención al “debilitamiento de la fe y de los valores, el individualismo, el empobrecimiento de las relaciones”.
En la parte final, se hace una mención breve pero significativa sobre “los divorciados en nueva unión”. El contexto es la “Eucaristía dominical, cuando con toda la Iglesia la familia se sienta a la mesa con el Señor”. Por eso, aseguran “en la primera etapa de nuestro camino sinodal, hemos reflexionado sobre el acompañamiento pastoral y sobre el acceso a los sacramentos de los divorciados en nueva unión”.