Una guía práctica cada día para orar con la Escritura hasta Navidad
LECTIO DIVINA Miércoles IV Adviento Ciclo B |
Invocación al Espíritu Santo:
Ven Espíritu Santo,
Ven pues queremos que nos instruyas,
Vamos a leer la Sagrada Escritura que Tú inspiraste.
Queremos que llegues a nuestra vida y nuestro corazón
Que la Palabra que se Encarnó en María por tu obra y gracia
también podamos vivirla nosotros.
Mueve nuestra inteligencia y nuestra voluntad para entender lo que el Padre quiere decirnos a través de su Hijo Jesús, el Cristo, a quien estamos en espera vigilante
Que tu Palabra llegue a toda nuestra vida y se haga vida en nosotros.
Amén
TEXTO BIBLICO: TEXTO BIBLICO: Lucas 1, 67-79 «Nos visitará el sol que nace de lo alto» |
1,67: Su padre Zacarías, lleno de Espíritu Santo, profetizó:
1,68: Bendito el Señor, Dios de Israel,
porque se ha ocupado de rescatar a su pueblo.
1,69: Nos ha dado un poderoso Salvador
en la Casa de David, su siervo,
1,70: como había prometido desde antiguo
por boca de sus santos profetas:
1,71: para salvarnos de nuestros enemigos,
y del poder de cuantos nos odian,
1,72: manifestando su bondad a nuestros padres
y recordando su alianza sagrada,
1,73: lo que juró a nuestro padre Abrahám,
que nos concedería,
1,74: ya liberados del poder enemigo,
lo sirvamos sin temor en su presencia,
1,75: con santidad y justicia toda la vida.
1,76: Y a ti, niño, te llamarán profeta del Altísimo,
porque caminarás delante del Señor,
preparándole el camino;
1,77: anunciando a su pueblo la salvación
por el perdón de los pecados.
1,78: Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
nos visitará desde lo alto un amanecer
1,79: que ilumina a los que habitan en tinieblas
y en sombras de muerte,
que endereza nuestros pasos
por un camino de paz.
BIBLIA DE NUESTRO PUEBLO
LECTURA: ¿Qué dice el texto? |
Zacarías, el Padre de Juan, después de recuperar el habla, cuando pone el nombre a su hijo, comienza a dar gracias a Dios con las palabras de un himno que desde entonces recitamos de memoria los cristianos. ¡Bendito sea el Señor, Dios de Israel! Porque ha visitado y redimido a su pueblo.
Son palabras muy profundas. Sobre todo dichas hace tanto tiempo. Las ideas religiosas que había en aquel tiempo dividían al mundo de los seres humanos en la tierra y a los dioses en los cielos muy lejanos.
Pero el Dios de Israel es diferente, Él viene a convivir con su pueblo, sale de la eternidad, para “introducirse” en nuestra historia.
Ha venido el “sol que nace de lo alto” y así con su luz ilumina a los que viven en tinieblas y en las sombras de la muerte. Es decir, son desafíos que el evangelista pone ante los grandes dirigentes que se sienten soles. Ahora con la única luz verdadera, vendrán a iluminar a todos.
MEDITACION: ¿Qué me dice a mí el texto? |
Nos preguntamos para profundizar en nuestra vida estas palabras de Salvación:
- ¿En verdad reconozco en lo profundo de mi corazón la gran hazaña de Dios por enviar a su Hijo a salvarme? ¿Me creo necesitado de la salvación? O… ¿la sociedad del confort me sacó la preocupación de la salvación?
- ¿Qué pienso cuando Zacarías dice que Dios mandó el “sol que nace de lo alto para iluminar a los que viven en tinieblas? ¿Necesito ese sol en mi vida? ¿Busco también enderezarla por caminos de paz? Que en esta Navidad, la mejor fiesta para la paz, reconozcamos al Salvador
ORACION: ¿Qué le digo yo al Señor? |
Orar, es responderle al Señor que nos habla primero.
- Gracias Señor por que tu Palabra que viene a iluminarnos.
- Gracias por venir a visitarnos, a redimirnos, a quedarte con nosotros.
- Que en esta fiesta de Navidad, te reconozcamos a Ti en los procesos de la vida.
CONTEMPLACION: ¿Cómo interiorizo el texto? |
Para el momento de la contemplación podemos repetir varias veces este versículo del texto para que vaya entrando a nuestra vida, a nuestro corazón:
«Nos visitará el sol que nace de lo alto» (Versículo 78)
Y de esta forma nos ponemos en contemplación.
ACCION: ¿A qué me comprometo? |
Debe haber un cambio notable en mi vida. Estoy orando con el Evangelio para cambiar mi vida, no para cambiar a Dios Me dirijo a mi interior para ver esos lugares de mi corazón donde no entró el “sol que nace de lo alto” Voy a realizar una acción concreta digna de la Navidad y que soy cristiano. No dejes pasar más tiempo.
Por el Hno. Ricardo Grzona, frp