No busques tus cosas. Ten caridad, predica la verdad; entonces llegarás a la eternidad, donde encontrarás seguridad #SanAgustin (Sermón 78,6)
San Agustín nos habla de esta terrible fuerza de la inercia, de forma indirecta. Nos propone que si queremos encontrar seguridad no busquemos nuestros intereses. ¿Cómo es esto posible? El sentido común nos dice que si nos ocupamos de nuestras cosas, es cuando estaremos más seguros.
Cristo nos dijo que "Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por causa de mí, la hallará" (Mt 16, 25), lo que concuerda bastante bien con lo que San Agustín nos señala. El nexo de unión entre ambas frases es la palabra caridad. Dios es Amor, Caridad, por lo tanto si tenemos caridad estamos dejando actuar a Dios a través de nosotros. Nuestra voluntad deja de predominar, para que la Voluntad de Dios se haga presente.
Sí la Voluntad de Dios nos mueve ¿Qué podemos temer? ¿El desprecio de los demás? ¿Su rechazo? Sin duda, podríamos tenemer vernos señalados, marcados por seguir a Cristo. Pero ¿No es cierto que ya hemos sido marcados por el bautismo? Entonces no hacemos más que evidenciar el signo, el sacramento recibido. No tenemos que temer. Dios sabe lo mejor para cada uno de nosotros. Nosotros, tan sólo imaginamos lo bueno que nos puede suceder.