“Se ve que el santo nos quiere a medias, sólo se ha licuado un poco”, bromea el PapaLa sangre de san Genaro, el milagro que anualmente se repite en la fiesta del santo patrón de la ciudad de Nápoles, volvió a repetirse este sábado 21 de marzo, de forma extraordinaria ante la visita del Papa Francisco.
"La sangre se ha licuado a medias", anunció el cardenal Crescenzio Sepe, al concluir el discurso del Papa a los sacerdotes y religiosos diocesanos. "El arzobispo ha dicho que la sangre se ha licuado a mitad, se ve que el Santo nos quiere a mitad debemos convertirnos más", bromeó inmediatamente el Papa.
El milagro se repite en las fiestas del Santo, pero ante un Papa no ocurría desde 1848.
La historia certifica un solo precedente. La sangre contenida en la ampolla – balsamera – es del siglo IV – V y se había disuelto sólo en presencia del Papa Pío IX.
En las calles adyacentes, la gente gritaba: ¡milagro, milagro! Parecía un gol, el pueblo de Nápoles ama el fútbol y vive la religiosidad de la misma manera con pasión.
Fuera del Duomo, los fieles han gritado y se han emocionado. Con este ‘medio milagro’ durante la veneración de las reliquias de san Genaro, el Santo Padre ha terminado el encuentro junto al clero, los religiosos y los diáconos permanentes en la catedral de Nápoles.
Luego el Papa se ha dirigido a la basílica del Gesù Nuovo y tendrá un encuentro con los enfermos en privado.