Video con imágenes aéreas del pontífice que para el tráfico ante la incredulidad de la seguridad y de los organizadores en Ecuador
El papa recorrió en papamóvil el Parque del Bicentenario este martes 07 de julio para saludar a los fieles, más de un millón y medio, que lo esperaban para la Santa Misa por la Evangelización de los Pueblos.
En medio de la multitud el papa se dejó cautivar por el grito de jubilo de una señora anciana que le pedía la bendición con tanto brío y fe, que el papa pidió a su guardia de seguridad, Zanetti, de parar el auto. ¡Pero, Santidad estamos fuera del programa! -“No importa ¡Paren el coche!”, Francisco bajó del papamóvil abraza la anciana mujer.
Aquí el momento en que el Papa hace detener la comitiva:
Papa Francesco si ferma durante il percorso from Aleteia on Vimeo.
(function(d, s, id) { var js, fjs = d.getElementsByTagName(s)[0]; if (d.getElementById(id)) return; js = d.createElement(s); js.id = id; js.src = “//connect.facebook.net/it_IT/sdk.js#xfbml=1&version=v2.3”; fjs.parentNode.insertBefore(js, fjs);}(document, ‘script’, ‘facebook-jssdk’));
Posted by
L’Osservatore Romano on
Lunedì 6 luglio 2015
Sucesivamente, el papamóvil con Francisco abordo siguió la marcha entre la multitud para finalmente llegar al altar donde se realizaría la misa presidida por el papa y concelebrada con 1.200 sacerdotes.
El grito de Jesús, el revolucionario nazareno que nació en Belén hace más de 2000 años, fue el objeto de palabras de esperanza y libertad.
En su segunda homilía en tierras latinoamericanas el papa citó a Jesús en la Última Cena: ”La palabra de Dios nos invita a vivir la unidad para que el mundo crea” y añadió: ”Me imagino ese susurro de Jesús en la última Cena como un grito en esta misa que celebramos en ”El Parque Bicentenario”.
Un susurro para liberar los últimos, los pobres, los necesitados.