Respuesta a un estudio americano que concluye que la Biblia está “ligeramente más inclinado a la violencia que el CoránUn estudio realizado por Tom Anderson, ingeniero y desarrollador neoyorquino, demuestra que la Biblia hace más referencias al “asesinato” y a la “destrucción” que el Corán. Gracias a un programa de software de análisis, OdinText, el ingeniero midió el número de ocurrencias de palabras pertenecientes a un campo léxico violento. Después de dos minutos y tras 886.000 palabras analizadas, las conclusiones OdinText son indiscutibles: el “asesinato” y la “destrucción” constituyen el 2,1% del libro de los musulmanes, frente al 2,8% del Nuevo Testamento y no menos del 5,3% del Antiguo Testamento (puede ver el estudio completo aquí).
Un impulso a Obama contra Donald Trump
El estudio –el autor no lo oculta– surge en el momento oportuno para apoyar a Obama en una exigencia que explicaba durante un discurso televisado, la de “rechazar toda política que tenga como objetivo a las personas a causa de su religión”. Así respondía el presidente demócrata al candidato republicano Donald Trump que, por su lado, había propuesto prohibir la entrada de todos los inmigrantes musulmanes a Estados Unidos. Pero, más allá de lo que haya motivado el estudio, ¿deberíamos rendirnos a sus argumentos “científicos”, cargados de tablas y estadísticas?
El sentido de las palabras
Un internauta aportó una primera respuesta llena de sentido común a los perspicaces resultados de Tom Anderson: el estudio sólo tiene en cuenta las ocurrencias de las palabras, pero no tiene en cuenta el sentido de las frases. Según la metodología seguida por OdinText: “Cuando terminen los meses sagrados, matad a los asociadores donde los encontréis” (Sura 9, Versículo 5), se encuentra al mismo nivel que “Ha resucitado de los muertos y va delante de vosotros a Galilea; allí lo veréis” (Mateo 28:7).
“En el Corán y en la Biblia, las palabras no significan lo mismo”
El padre François Jourdan, experto en Islam, advierte: “Entre el Corán y la Biblia, todas las palabras iguales, sin excepción, tienen un significado diferente porque forman parte de una coherencia doctrinal –visión de Dios, de uno mismo, del mundo y otras– muy diferente”. El sacerdote pone el ejemplo de la palabra Misericordia: en la Biblia, hace referencia a la profunda emoción del Salvador con respecto a los seres humanos, según la raíz bíblica de la palabra. En el Corán, la misericordia es la piedad de los que son fuertes hacia los que son débiles.
Dos autorías para los textos
El padre Jourdan añade una cosa más que no tiene cabida en el ordenador de Tom Anderson: la autoría de los textos sagrados. Para los musulmanes, Dios es el único autor del Corán, mientras que para los cristianos, la Biblia fue inspirada por Dios, redactada después de una reflexión de siglos de tradición oral secular. “Para los cristianos (bajo la luz plenaria de Cristo) Dios es amor (1 Jn 4: 8-16) y nada más que Amor. Esto exige que los cristianos corrijan la lectura de los pasajes violentos producto de la redacción humana y no de Dios. El número de palabras no tiene nada que ver con el sentido, y la visión de Dios es completamente diferente”.