Es interesante a pesar de su mirada poco crítica a la torpe actuación de EE.UU. en los conflictos de Oriente MedioDel director Michael Bay (La isla, Transformers, Viernes 13, La Roca…) nos llega esta película basada en los hechos reales del asalto yihadista en 2012 al consulado de Estados Unidos en Bengasi (Libia), en el que murieron varios funcionarios americanos, entre los cuales estaba el embajador Chris Stevens.
Con un guión de Chuck Hogan, la película nos cuenta la defensa numantina que un pequeño grupo de agentes de la CIA hicieron tanto del Consulado como de un cuartel “secreto” de la CIA, situado a pocas manzanas del primero.
La película es una expresión trepidante del caos que se vivía en Bengasi, donde nadie es lo que parece, y donde, como dice un personaje del film “nada distingue a los buenos de los malos”. Pero tampoco dentro del “bando” americano, todos viven la situación de la misma manera. Los hay que no ven amenazas por ningún lado, otros que las ven por todas partes, y los que como siempre, tardan en reaccionar.
13 horas… es un coctel de explosiones, disparos, persecuciones, incendios, morteros, ametralladoras,… en un deliberadamente confuso puzzle que trasmite perfectamente el infierno en que se había convertido la región tras la caída del dictador Gadaffi. Pero la cinta no se queda sólo en la parafernalia bélica, sino que trata de desarrollar tramas personales y familiares, en las que se declinan temas como el compañerismo, el sentido del deber, la fe y ciertos conflictos morales.
Aunque se trata de una película coral, destacan las interpretaciones de James Badge Dale y John Krasinski, quizá los principales protagonistas. En el lado de los atacantes no se distingue claramente un antagonista perfilado, sino que se trata de un colectivo amorfo e impreciso, que es como seguramente era percibido por los agentes americanos.
La película es excesivamente larga (144 minutos) y algo confusa en su exposición, pero engancha e interesa a pesar de ciertos tópicos y una mirada poco crítica hacia la torpe actuación de Estados Unidos en los conflictos de Oriente Medio.