Una tradición que data de 1931La picea de Noruega es un árbol bastante común en el noreste estadounidense. Pero uno de ellos, año tras año, desde 1931, se convierte en uno de los símbolos de la Navidad neoyorkina. Este año los empleados del Rockefeller Center viajan 170 millas desde Manhattan hasta Oneonta, al norte de la ciudad, para cortar el árbol que adornará la plaza frente a la catedral de San Patricio.
El árbol, que este año mide 94 pies de altura (casi treinta metros), está adornado con casi cincuenta mil luces y una estrella de cristales de Swarowski.
El árbol de Navidad del Rockefeller Center es ya un icono de la temporada de Navidad de la ciudad. El primer árbol fue instalado en 1931, durante la era de la llamada Gran Depresión, pero no se le adornó con luces hasta 1933.
El hombre que está detrás de la operación de la instalación del árbol es Erik Pauze, el jardinero jefe del Rockefeller Center. Escoger el árbol adecuado para la plaza, año tras año, es una de sus responsabilidades. Así, buena parte de su oficio consiste en visitar todos los viveros de los estados cercanos (Jersey, Connecticut y las afueras de Nueva York) para dar con un árbol de buena forma, y capaz de soportar el peso de los ornamentos tan pesados que se le añaden.
El árbol se encendió en la ciudad, como todos los años, el 30 de noviembre, según se lee en el blog de TravelAndLeisure.com