Cuando todo parecía estar controlado el coche comenzó a moverse…Son dos hermanos. Dos héroes anónimos. Ivan Fernández es Mosso d’Esquadra (policía autonómica en Cataluña) y Cristian es auxiliar del servicio de emergencias. Ambos se encontraban en su apartamento mientras una tromba de agua asolaba la localidad tarraconense de Cunit, en España.
De repente vieron un vehículo estaba siendo arrastrado. No estaban de servicio, pero no lo dudaron un instante. Bajaron rápidamente del apartamento y socorrieron a los ocupantes del vehículo: un hombre y cinco niños, de entre 2 y 10 años de edad.
Sacaron a dos niños por la ventanilla y cuando todo parecía estar controlado el coche comenzó a moverse. El tercer niño saltó por la ventanilla y se lo llevó la corriente. Los dos hermanos se tiraron al agua a por él y le salvaron la vida.
Tras ello, nadaron hacia el coche y rescataron a los dos menores restantes que quedaban encerrados. El conductor también consiguió salir gracias a las indicaciones de estos hermanos.
“Mi hermano y yo vimos lo que estaba ocurriendo y sólo pensamos en bajar a actuar”, explican en una entrevista en la radio española Cadena COPE, “bajamos y todo era fácil hasta que el primer niño cayó al agua, el niño nos decía: por favor, no me soltéis”.
Ninguno de los dos se considera héroe y muestran que actuaron de buena fe y que seguro que cualquier otra persona en su lugar hubiera hecho lo mismo.
Su rescate, producido hace dos años, ha tenido recompensa y han sido galardonados con el premio “Ejemplo a seguir”, de II edición de los Premios ONE (que reconocen a quienes contribuyen a garantizar la seguridad de las personas ante el cumplimiento del deber, incluso poniendo en riesgo sus vidas), entregados el pasado 30 de noviembre en la capital española.
No lo hicieron por ganar un premio o merecimiento, ni siquiera pensaban en su seguridad: “No nos importaba la integridad física nuestra sino salvar al niño, la tranquilidad era haber hecho todo lo posible”.