En la audiencia general, invita a participar en la Semana de Oración para la Unidad de los Cristianos que empieza hoy“Ante la muerte, el hombre reconoce su fragilidad y se abre a Dios con una oración llena de esperanza”, dijo el papa Francisco que reflexionó sobre “el vínculo entre esperanza y oración” durante la audiencia general del miércoles en el aula Pablo VI del Vaticano.
Asimismo, al final de la predicación, recordó que hoy inicia la anual Semana de Oración para la Unidad de los Cristianos (18-25 enero).
El Pontífice instó a que la intención de la unidad se refuerce con la oración. “Y esta esperanza no desilusiona, como demuestran los tantos pasos recorridos en el último siglo hacia la plena unidad de los cristianos”. “Desde hoy hasta el 25 de enero, reforcemos nuestra oración por esta intención”, abundó.
En la predicación rememoró la figura bíblica de Jonás (1, 4-5a. 6), “profeta en salida, que Dios envía a la periferia”, específicamente “a Nínive, ciudad enemiga de Israel y por tanto indigna de la misericordia de Dios, para predicar su conversión. Jonás no lo entiende y huye”. Nínive, para un israelita como Jonás, representaba una amenaza.
La oración es indicada como expresión de esperanza en momentos difíciles, como cuando la vida pende de un hilo.
Jonás “en el barco encontrará a unos paganos que al verse en peligro por una tempestad se ponen a rezar e invitan al profeta a unirse a ellos”. Los paganos se salvan gracias a la oración de Jonás.
“En ellos se realiza un milagro aún más grande: gracias a esta experiencia de muerte logran encontrar al Dios de la vida, transformándose su oración en una acción de gracias”.
Sucesivamente, Francisco prosiguió explicando que, “más tarde, el rey de Nínive, tras oír la predicación de Jonás, se confía a la misericordia divina y llama a todos a la oración y a la penitencia, salvando así la ciudad”.
Al final de la audiencia, saludó a los peregrinos de lengua española, en particular a los grupos provenientes de España y Latinoamérica.
Así, los instó a mantenerse en la esperanza que da la oración. “En la oración, nuestra esperanza no se ve defraudada. En esta Semana de oración que hoy iniciamos pidamos insistentemente al Padre por la unidad de todos los cristianos. Que Dios los bendiga”.