El corazón que distingue al jugador de rugby argentino es el mismoPumas y Pumpas. La diferencia es una letra. Pero los primeros compiten en las ligas más poderosas del mundo y representan a la Argentina en los torneos de Rugby más importantes, y los segundos luchan por poder viajar al mundial de rugby inclusivo, que tendrá lugar este año en España. Sin embargo, el corazón que distingue al rugbier argentino, se confirmó estos días, es el mismo.
Los Pumpas XV, equipo integrado por jóvenes con distintas discapacidades, enfrentó en un entrenamiento a los Jaguares, equipo argentino que compite por el Super Rugby, liga internacional de rugby de la que participan los equipos más poderosos del hemisferio sur. La mayoría de los Jaguares integran el plantel de Los Pumas que luego compite por la Rugby Championship.
El desafío había sido anunciado con un video en redes sociales. Para los Pumpas no sería un partido más; expondrían su invicto ante sujetos bastante más fornidos y altos. Nacidos hace un año, los Pumpas están integrados por atletas de distintos clubes de distintas provincias. Con el apoyo de familiares e incluso facilitadores dentro de la cancha, el equipo se fue armando y combinando las fortalezas de cada uno. En la modalidad Mixed Ability, el plantel está formado por jóvenes con discapacidades intelectuales y por facilitadores.
Se trata de una disciplina que permite la participación de deportistas con alguna discapacidad en distintos grados de complejidad, en un deporte de alta fricción física, pero también de mucha paciencia y perseverancia. En rugby, para aquel que no lo conozca, se avanza hasta la línea de marcación pasando la pelota ovalada siempre hacia atrás.
“Nunca perdemos la pelota. Si la tenemos, tenemos poder, podemos ganar. Para seguir adelante. Porque los Pumpas van a poder ganar. Para poder ir al Mundial de España. Para eso hay que dejar todo en este partido. Podemos ganar. Nosotros como Pumpas tenemos que seguir. No aflojemos. Ir para adelante”, arengó uno de los Pumpas antes del partido; la trisomía en el cromosoma 21 pasa absolutamente desapercibida en la pasión de un líder como él.
En la cancha, se vio mucho respeto. Participación y motivación, pero también competencia. Uno de los desafíos era ver una carrera entre Santiago “El Rayo” Ruda, figura de los Pumpas, y Santiago Cordero, uno de los wings más rápidos y hábiles del mundo.
La confianza de “El Rayo” antes del partido era plena. En una entrevista con el portal Mundo Ovalado, sitio muy activo en la difusión de esta nobilísima iniciativa, Ruda aseguraba: “Viéndolo correr a Santiago Cordero en los Pumas y Jaguares diría que es rápido, pero nunca jugó contra mí en la velocidad”.
“Nosotros no les tenemos miedo a estas bestias”, explicaba por su parte el capitán Pumpa Martín Perego, en referencia a los poderosos jaguares.
El resultado fue absolutamente anecdótico, e incluso algunos Pumpas se sumaron por un rato al equipo de los Jaguares. El capitán Puma Agustín Creevy dijo en la ronda final: “Queríamos agradecerles; para nosotros son los verdaderos ídolos”. “Vamos Pumpas, vamos Pumpas” fue la arenga final a la que todos se sumaron.
El próximo mundial de rugby para la modalidad tendrá lugar en la ciudad española de Vitoria-Gasteiz. En la anterior edición, los jugadores argentinos, por falta de representación nacional, debieron integrarse al seleccionado italiano. Este año, si consiguen los patrocinios necesarios, la pasión argentina estaría representada por los Pumpas.