Llevará al abusador a la más absoluta y total ignoranciaHa habido ya muchos intentos –cuando menos publicados— de protección contra usuarios abusivos en la red social de Twitter. Hasta el momento, prácticamente ninguno ha funcionado. Los casos de abusos sufridos en esta popularísima red siguen al alza.
Sin embargo, esta misma semana parece que Twitter ha encontrado el método más cercano a lo ideal para proteger, sobre todo, a personas vulnerables. Es el método del equilibrio entre censurar directamente a un usuario y balancear el contenido que reciben los demás.
De acuerdo a la información diseminada por portales de noticias tecnológicas, el proyecto de Twitter es, básicamente, limitar el alcance de aquellos usuarios que son sospechosos de cometer abusos contra otros.
Como hizo anteriormente, Facebook, se trata de dejar al sujeto agresivo con la “ilusión” de que, en efecto, mandó su mensaje al quien está agrediendo, pero el comentario no se despliega en la pantalla del receptor, de tal suerte que hace pensar a aquel que su mensaje no “caló” y podría desistir de sus acciones hostiles.
En cambio, si se le censuraba directamente, buscaría otros medios para seguir hostilizando a su víctima.
Hemos detectado algún comportamiento abusivo…
Los mensajes abusivos solamente podrán ser vistos por los seguidores del emisor, pero no por el receptor o por quienes no lo siguen. Exactamente como si se tratara de una cuenta privada. El alcance y la difusión de los mensajes abusivos se limita. Y el abusador cae en la total ignorancia de los que, supuestamente, estaría hostilizando.
Bueno, este modelo “mixto” es lo que se ha planteado desde Twitter para combatir la plaga de personajes abusadores en la red social. Y ha pegado donde más duele: en su capacidad de movilizar violencia. Es más, ni siquiera las quejas de que están siendo bloqueados salen al público. Se quedan entre los suyos.
La idea es que la poca relevancia haga desistir a los abusadores de su conducta malsana. Que dejen de exhibirse y que su perfil completo pueda ser señalado, incluso por quienes lo siguen, como un perfil tóxico.
El sistema funciona a través de reportes de los usuarios y si Twitter considera la política abusiva, envía un correo electrónico de este tipo:
“Hemos detectado algún comportamiento potencialmente abusivo en su cuenta, por lo que sólo sus seguidores podrán ver su actividad en Twitter por la cantidad de tiempo que se muestra a continuación…”.
¿Cuánto durará el “castigo”? Dependiendo de la reincidencia del sujeto que abusa y el nivel al que llegan sus conductas abusivas en la red. No se trata, desde luego, de una forma de erradicación definitiva de los abusos en Twitter, pero es un primer paso para limitarlos. Sin duda.