Una cabeza incorrupta, sangre seca que se vuelve líquida, un inodoro en una vidriera… En el transcurso de 2000 años de historia de la Iglesia, los católicos han quedado cautivados con incontables milagros y misterios. Aunque algunas de estas curiosidades, como los santos incorruptibles y los milagros eucarísticos, son conocidas en la cultura popular católica, hay otras rarezas que no son tan famosas.
Aquí hay cinco curiosidades católicas sorprendentes y relativamente desconocidas que han dejado mudos a científicos, historiadores e incluso a fieles de todas las épocas.
1) La cabeza de Oliver Plunkett– Drogheda, Irlanda
Oliver Plunkett fue arzobispo de Armagh y Primado de Toda Irlanda durante el siglo XVII. En 1681, fue ejecutado por “traición”, o sea, por promover la fe católica durante la Reforma protestante. Fue ahorcado y descuartizado en Tyburn, Inglaterra. Sus restos terminaron repartidos entre varias iglesias católicas para su veneración.
Ahora, imagina que entras en una pequeña y silenciosa iglesia de Drogheda, Irlanda, y te encuentras “cara a cara” con una cabeza sin cuerpo expuesta en una vitrina encantadora. El espectáculo es chocante, pero también asombroso.
Para los interesados en hacer una visita, la iglesia de Saint Peter tiene una nota de 5/5 en TripAdvisor y está listada como la primera de las 26 cosas que no te puedes perder en Drogheda.
2) La sangre de san Genaro– Nápoles, Italia
La catedral de Nápoles alberga un vial con la sangre de un mártir de los primeros cristianos, san Genaro, un obispo del siglo III. Durante la mayor parte del año la sangre está seca, pero milagrosamente se licúa tres veces al año, en días que conmemoran su vida y su influencia.
También se dice que la sangre se licúa de forma espontánea en otras ocasiones, como en las visitas papales. El 21 de marzo de 2015, el papa Francisco veneró la sangre seca durante una visita a la catedral de Nápoles, diciendo ante ella la Oración del Señor y besándola. El arzobispo Sepe anunció entonces que “la sangre se ha licuado a medias, lo que muestra que san Genaro ama a este papa y a Nápoles”.
No obstante, la sangre solo se licuó a la mitad, por que el papa bromeó diciendo: “Se ve que el santo nos quiere sólo a medias. Tenemos que convertirnos más”
3) Escalera Santa – Roma, Italia
Si estás en Roma y la célebre escalera de la Plaza de España está repleta de turistas, no te preocupes. Quizás prefieras visitar unas escaleras de mármol menos populares pero infinitamente más significativas, la Scala Sancta.
Según la tradición, esta escalera de 28 peldaños fue transportada desde el pretorio de Poncio Pilato en Jerusalén y son los mismísimos escalones que descendió Jesús después de ser condenado a muerte. Santa Helena, madre de Constantino I el grande, trajo las escaleras a Roma allá por el 326.
La idea de desmantelar una escalera de mármol, luego cruzar un océano y montarla otra vez en otro continente es algo singular cuanto menos. Pero lo más insólito es que se permite a los peregrinos ascender la Scala Sancta de rodillas, una forma ciertamente inolvidable de seguir los pasos de Jesús incluso en el siglo XXI.
La Escalera Santa está protegida por una capa de madera, pero hay unas cuantas “ventanas” en la madera para que los peregrinos puedan ver el mármol de debajo. Las ventanitas tienen una lámina de plástico como protección adicional para el mármol.
4) Sabemos dónde están los apóstoles
“Y les dijo: ‘Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura’” (Marcos 16:15). Cuando Jesús dijo estas palabras a sus apóstoles, ellos siguieron su encargo bastante al pie de la letra y recorrieron todo el mundo conocido en aquel tiempo. Por increíble que parezca, las tumbas de los santos apóstoles se encuentran en varios lugares de todo el mundo, desde España (Santiago) a la India (san Tomás) pasando por Turquía (san Juan). La mayoría de los 12 apóstoles están enterrados en Italia y aunque Pedro es el que se lleva casi toda la atención en Roma, Bartolomeo es el más accesible, en una isla del río Tíber, donde también hay reliquias de mártires recientes.
Plantéate un nuevo reto de viaje: visitar todas las tumbas de los apóstoles por todo el mundo.
5) El inodoro de santa Frideswide – Oxford, Inglaterra
La tumba de santa Frideswide (o Frithuswith o Fredesvinda) se encuentra en sagrario en la capilla latina de Christ Church Cathedral. En el extremo de la capilla, una vidriera ilustra la vida de santa Frideswide como princesa convertida en priora. Vivió desde el 650 hasta el 727 pero lo sorprendente es que se puede ver un inodoro funcional moderno, de la época victoriana, en el panel de la vidriera que representa su muerte.
Edward Burne-Jones completó esta vidriera en 1859 y su inclusión de un retrete rosa en la escena de la muerte de esta santa medieval es tan ridícula como desconcertante. Algunos historiadores creen que Burne-Jones estaba haciendo gala de su sentido del humor, aunque otros expertos sugieren que el inodoro fue una petición de sus patrocinadores. Sin ninguna documentación ni explicación escrita de Burne-Jones, solo se puede concluir que el misterio es una locura que hace aguas por todos lados.