El Pontífice hace un llamamiento a la comunidad internacional por las víctimas del conflicto en Siria y también recordó a los fallecidos en el atentado en el metro de San Petersburgo[protected-iframe id=”e7cc0120816bddd10b3fa3cb9d94bdba-95521297-93014404″ info=”https://player.vimeo.com/video/211652144″ width=”640″ height=”360″ frameborder=”0″ webkitallowfullscreen=”” mozallowfullscreen=”” allowfullscreen=””]
“Asistimos horrorizados a los últimos acontecimientos en Siria” dijo el papa Francisco al referirse a la noticia de la muerte de al menos 72 personas, entre ellas 11 niños, que han perecido debido a un supuesto bombardeo con gas tóxico que tuvo lugar en el norte del país.
Lo hizo al final de la audiencia general, ante 15.000 fieles y peregrinos, este miércoles 5 de abril 2017 en la Plaza de San Pedro en el Vaticano.
El Pontífice, al final de la tradicional audiencia general, rezó por las víctimas y sus familias: “Expreso mi fuerte desaprobación de la matanza inaceptable que tuvo lugar ayer en la provincia de Idlib, en la que murieron decenas de civiles, entre ellos muchos niños”.
El llamamiento a las conciencias también fue dirigido a nivel local e internacional para “poner fin a esa tragedia y llevar alivio a esa querida población durante demasiado tiempo agotado por la guerra”.
Mientras se cumple el sexto aniversario del inicio del conflicto sirio, el Obispo de Roma animó a los esfuerzos de “aquellos que, en medio de la inseguridad y el malestar, se esfuerzan por llevar una ayuda a los habitantes de esa región”.
58 muertos, entre ellos al menos 11 niños tras un supuesto bombardeo químico en la ciudad siria de Khan Shaykun… https://t.co/dP9m9pzDqt
— Aleteia (@AleteiaES) April 4, 2017
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos los heridos presentaban síntomas de asfixia, vómito, problemas para respirar y algunos convulsionaban. Las imágenes de los equipos de emergencia ponen en evidencia un panorama apocalíptico en el que la población civil sufre las consecuencias.
La Agencia Fides, que cita un documento del Jesuit Refugee Service (JRS), “estima que 13,5 millones de sirios necesitan asistencia humanitaria, y la mitad de esa cifra son niños, que además han perdido su infancia: casi 3 millones de niños sirios menores de cinco años han crecido sin conocer otra realidad que la guerra”.
Sin contar el número de desplazados, más de 6,3 millones. Alrededor de 4,9 millones de personas (en su mayoría mujeres y niños) han huido a los países vecinos de Oriente Medio, como el Líbano, Turquía, Jordania, Egipto e Iraq.
Ayuda humanitaria para Siria
Ayer, en la sede de la Unión Europea en Bruselas, se inauguró la Conferencia “Sostener el futuro de Siria y de la región” co-presidida por la Unión Europea, Alemania, Kuwait, Noruega, Qatar, Reino Unido y Naciones Unidas.
En esa sede, Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede confirmó que la Iglesia Católica aprecia “en gran medida el énfasis que esta conferencia de donantes” tiene en materia de “ayuda humanitaria” y en los “esfuerzos para respaldar el alto el fuego y una solución política a la crisis”.
De esta manera, reafirmó el deseo de la Iglesia Católica de continuar su asistencia humanitaria en 2017. Ya en 2016, la Iglesia Católica, a través de su red de organizaciones de caridad, han contribuido a proporcionar 200 millones de dólares de ayuda humanitaria de los que se han beneficiado directamente más de 4,6 millones de personas en Siria y el resto de la región.
Atentado metro en Rusia
Por otro lado, el Papa lamentó el “grave atentado” que se cobró el lunes la vida de 14 personas y causó decenas de heridos en el metro de San Petersburgo, Rusia.
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El caos y la muerte se apoderan de San Petersburgo#PrayForSanPetersburg https://t.co/yHs1EkK39T
— Aleteia (@AleteiaES) April 3, 2017
El Obispo de Roma confió a la misericordia de Dios las personas fallecidas y expresó su cercanía espiritual a sus familias y a todos “aquellos que sufren a causa de este dramático suceso”.
Según varias agencias, la policía Rusia considera como principal sospechoso de haber puesto la bomba que explotó dentro del metro a un ciudadano de Kirguizistán y quien en redes sociales lanzaba mensajes fundamentalistas e interpretaciones del Islam.
Por su parte, El arzobispo católico de Moscú en una carta dirigida a los fieles de la Archidiócesis, Pavel Pezzi, aseguró su gran sentimiento de pesar por el que consideró un “malvado acto de terrorismo en San Petersburgo”.
“Junto con todos los fieles católicos y creyentes de otras confesiones y religiones elevo a Dios mi ferviente oración pidiendo que libre a Rusia y a todo el mundo de la maldición del terrorismo”, sostuvo el arzobispo.
