Logró la hazaña sin oxígeno complementario, colocó la bandera de su país en lo más alto y todo por un fin loable Nadie espera vivir en las montañas, pero si muchos sueñan con escalarlas. Lo difícil no es subir, sino más bien descubrir la forma cómo bajar. ¿Dé que sirve llegar a la cumbre si al bajar sufrirás algún accidente? La vida se pone en riesgo, pero el peruano Víctor Rímac, natural de la ciudad de Huaraz, llegó a la cima del monte Everest, una de las montañas más altas del mundo, para dar a conocer su localidad, un pueblo ubicado a orillas del río Santa a 3,100 m.s.n.m en el corazón del Valle del Huascarán en la sierra central del Perú.
A menos de 40 grados bajo cero, Víctor no llevaba oxígeno en la cima del Everest. La noticia la compartió en su cuenta de Facebook.
Su proyecto lo inició desde los 14 años el huaracino dedicó su vida a prepararse para ascender cordilleras. Además de colocar la bandera del Perú en la montaña más alta del mundo, el joven alpinista busca presentar a la ciudad de Huaraz, como uno de los lugares más turísticos del Perú.
En la cima del mundo
Cuando escaló por primera el pico más alto del planeta una avalancha intentó acabar con su vida. En la segunda oportunidad, en 2015, Víctor sorprende al mundo al sobrevivir al terremoto en Nepal, que afectó el campamento base del Everest, donde sin embargo permaneció colaborando en las operaciones de rescate.
Rímac se convierte en el peruano más joven en llegar a la cima del Everest, por primera vez sin oxígeno artificial. Esta es toda una proeza que lo logró gracias a su preparación y el lugar.
Su proyecto aún no concluye. El peruano busca escalar las 14 montañas del mundo, ubicadas a 8.000 metros de altitud.
Con información de El Comercio