Un nuevo hecho fronterizo que sigue alimentando la tensión en la relación bilateral La noticia trascendió este domingo cuando ministro de Presidencia, René Martínez, junto a una comisión, se hiciera presente Chungará-Tambo Quemado, a más de 4.500 metros sobre el nivel del mar, un paso fronterizo con Chile.
El objetivo era llevar alimentos y agua potable a un grupo de camioneros bolivianos que se encuentran sin poder avanzar -en esa ruta tan importante para el transporte de carga- debido a un paro aduanero en Chile que ya lleva cinco días.
“Estamos enviando alimentos, comida y agua para nuestros hermanos transportistas. Esperamos que las autoridades chilenas faciliten distribución”, expresó el presidente Evo Morales a través de las redes sociales, al tiempo que presentó una imagen de los camiones en frontera.
Agua y comida serán enviadas al paso fronterizo de Colchane-Pisiga; reiteramos solicitud a autoridades chilenas de permitir su distribución. pic.twitter.com/M43z9YJVSK
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) May 29, 2017
Rápidamente, desde el gobierno boliviano este accionar fue calificado como un gesto de “ayuda humanitaria” y se salió a denunciar hostilidad de parte de las autoridades chilenas contra los transportistas bolivianos, consigna La Razón.
“No se entiende por qué se prohíbe, creo que forma parte de esta hostilidad, de esa agresividad de autoridades chilenas contra nuestro país”, expresó Martínez a ese medio.
Del mismo modo, el funcionario boliviano señaló que quiso llevarle alimentos a los bolivianos parados del lado chileno, pero no le fue permitido.
El propio Morales se había hecho eco este domingo de una información divulgada por transportistas bolivianos señalando que los Carabineros chilenos habían impedido la venta de alimentos por temas de sanidad.
Que bueno sería que instituciones defensoras de Derechos Humanos a nivel internacional puedan solidarizarse e interceder por los afectados
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) May 27, 2017
Desde hace días el paro indefinido de transporte en Chile, organizado por la Asociación Nacional de Funcionarios de Aduana de Chile, está afectando al sector. Si bien es un tema por resolver entre estos trabajadores y el gobierno, en cuanto a lo que se generó con Bolivia no hubo de momento alguna pronunciación oficial.
Pero este paro también está golpeando a los bolivianos que quedan rehenes en la zona fronteriza. Según el dirigente de tránsito pesado Marcelo Cruz, hay más de 1.200 camiones bolivianos de carga detenidos en la carretera, lo que también está generando cuantiosas pérdidas económicas, reproduce ABI.
Al mismo tiempo, esta situación se da en un marco de aumento de tensión (funcionarios bolivianos detenidos del lado chileno, demandas internacionales, etcétera) entre ambos países y cualquier elemento sirve de insumo para aumentar la polémica. Solo resta esperar que pronto haya alguna solución negociada y adecuada que pueda volver a llevar tranquilidad entre estos países hermanos.