El sacerdote no pierde la esperanza de celebrar la misa del domingo sin barreras ni divisionesAquí se reza rodeados de alambres de púas. Estamos hablando de Mitrovica, la ciudad principal del norte de Kosovo. Aquí, las tensiones étnicas están todavía muy fuertes y dividen a las comunidades locales. La iglesia de Santa Sava que se ve en las imágenes se encuentra en la parte albanesa de la ciudad, de mayoría musulmana, rodeada por alambre de púas.
Para la misa dominical están reunidas 12 personas, incluido el sacerdote ortodoxo, su esposa y sus cuatro hijos. Son los únicos serbios que quedan en esa parte de la ciudad desde 1998/99. El sacerdote Nenad Stojanovic espera el día en que pueda celebrar la liturgia dominical sin barreras ni divisiones.