528 homicidios de enero a mayo de 2017Ante el recrudecimiento de la violencia en el Estado mexicano de Michoacán, en el occidente de México, la Iglesia católica ha optado por ser proactiva. En lugar de lamentarse ante un “Estado fallido”, lo que ha hecho, encabezada por el cardenal de Morelia (capital de Michoacán), Alberto Suárez Inda, es contribuir a la construcción de la paz.
Con esta idea de fondo, la Arquidiócesis de Morelia anunció la creación de un órgano responsable de coordinar y promover que todas las acciones pastorales llevadas a cabo en esa jurisdicción tengan un enfoque de “Construcción de Paz” que urge restablecerse en el Estado de Michoacán.
Se trata de la puesta en marcha de la Dimensión Diocesana de Justicia, Paz y Reconciliación, que será la responsable de promover también la atención a las victimas y el acompañamiento a los jóvenes.
El periodo enero-mayo del año 1998 y de este 2017, han sido los más violentos en el estado de Michoacán, en las últimas dos décadas, con 533 y 528 homicidios respectivamente, según los datos oficiales del Sistema de Seguridad Pública Nacional.
Acción permanente
El documento en el que se anuncia la nueva Dimensión diocesana tiene, en resumen, los siguientes objetivos específicos:
–Impulsar la formación de conciencias, obtención de recursos, desarrollo de metodologías y la capacitación permanente, a fin de consolidar las acciones pastorales en la línea de la paz y la justicia.
–Promover la comunicación y la cooperación de todas las estructuras y organismos pastorales de la Diócesis y,
–Fomentar relaciones de colaboración permanente con actores de la sociedad civil y los gobiernos del municipio, el estado y del país, para lograr una mayor incidencia y transformación social.
La Arquidiócesis consideró que la inseguridad y la violencia que se viven requieren de una estrategia global y la participación de todos, pues en Michoacán, “a pesar de los esfuerzos realizados en los diversos niveles de gobierno, hay que reconocer que la violencia sigue creciendo. La realidad de la inseguridad y violencia es compleja y multidimensional”.
Cooperación de todos los sectores
El documento mediante el cual se lanza esta iniciativa explica: “No podemos, sin más, atribuir la violencia a una sola causa; hacerlo seria ingenuo y nos llevaría a pretender, también con ingenuidad, tener una única solución a una problemática tan vasta y complicada”.
En el documento firmado por el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, se sostiene que ver la violencia como un problema de salud publica, implica reconocer que el esfuerzo por erradicarla debe ser multidimensional y que se requiere un diagnostico interdisciplinar que identifique los principales factores de riesgo sobre los que hay que intervenir.
Asimismo, dice el documento, “es necesaria la cooperación de todos los sectores públicos y sociales para abordar el problema de la violencia mediante la acción colectiva, con estrategias diversas adoptadas por todos, cada quien, según el ámbito de la propia competencia”.
El nuevo organismo de construcción de paz en Michoacán será coordinado por el padre Juan Pablo Vargas, y tendrá como sede el templo del Carmen en la ciudad de Morelia.