El curioso caso de una iglesia colombiana, la de San Estanislao de Kotska que nunca se termina de “vestir”: Una iglesia con “falda”, pero sin “blusa”El 5 de julio de 2017 quedará marcada en la retina de los pobladores del Arenal -una la localidad colombiana ubicada en el departamento de Bolívar- como un auténtico “miércoles de rayos”.
Es que ese día dos fuertes impactos fueron noticia y se transformaron en tema de conversación durante los días posteriores. El primero, lamentablemente con desenlace trágico, pues provocó la muerte de dos campesinos.
El segundo, si bien estuvo vinculado a lo material, también fue llamativo. En este caso, la infraestructura que sufrió los efectos fue la torre de la iglesia San Estanislao de Kostka, un verdadero emblema de la localidad.
Cuando cayó el rayo, el cura párroco de esta iglesia, de nombre Víctor, estaba cenando y tuvo que apurar el último bocado para constatar qué fue lo que había pasado. Sin embargo, los mejores testigos -y al mismo tiempo los más asustados- fueron dos obreros que estaban realizando el duro trabajo de terminar de “vestir” la iglesia para festejar las Fiestas Patronales de San Estanislao de Kostka, sugiere una crónica elaborada por El Universal de Cartagena.
“En la otra torre hay un pararrayos, pero el rayo cayó en la derecha, hizo migas dos columnas del campanario… Los ladrillos cayeron a la calle, al techo de la iglesia y a casas vecinas. Había candela y humo”, explicó uno de ellos a ese medio.
Pero para muchos, y aquí la curiosidad, el hecho de que cayera un rayo sobre esta iglesia no es menor e incluso encierra un “mensaje divino”, por ende, una especie de “enojo” desde lo alto (los habitantes pueblerinos suelen ser muy creativos a la hora de exponer sus ideas y más cuando se intentar explicar lo inexplicable).
Es que desde hace muchos años se han estado haciendo gestiones para terminar de “embellecer” esta iglesia, pero siempre aparece alguna excusa o traba. “La iglesia tiene la falda, pero le falta la blusa”, se ha transformado en una de las expresiones más comunes entre los pobladores, deja entrever El Universal.
Incluso hace algunos años hasta un tema musical fue elaborado sobre este tema.
Recientemente, a pesar del escepticismo de varios, las autoridades locales se decidieron a dar ese gran paso y aparecieron los recursos. Pero, una vez que esto sucedió, y quedó pronta, un vehemente rayo tiró todo para atrás.
Un templo incompleto
Desde los tiempos en que el sacerdote jesuita Julio Vázquez Vélez (1905) esta iglesia ha sido centro de las miradas locales. Primero, como un lugar de palma y barro, luego, como una joya arquitectónica, aunque inconclusa. Se precisaron más de 30 años para levantarla, pero siempre con faltantes en su cúpula, subraya para ese medio el historiador local Rodolfo Ramos Jiménez.
“No se terminó su torre derecha”, indicó. Según este hombre, más allá de la fortaleza del rayo que la impactó, el hecho de que a esa parte le faltaran dos pisos representó una debilidad a la hora de afrontar el golpe.
¿La iglesia San Estanislao de Kostka podrá verse algún día en su plenitud? Es una de las grandes interrogantes que surgen luego de este episodio curioso.
“La iglesia tiene un valor sentimental incalculable. El rayo del 5 de julio nos decepcionó mucho. Todos queríamos ver a la iglesia bien pintada el día de la Virgen del Carmen, pero es una cosa que se nos sale de las manos. Son cosas del cielo”, señala historiador, quien al mismo tiempo se encargó de considerar a modo de “mensaje más humano” que de alguna manera lo acontecido debe motivar a concluir (terminar de “vestir”) de una vez por todas la torre de esta emblemática iglesia colombiana.
En base a EL Universal