Alistan elementos simbólicos de la procesión del Señor de los Milagros para obsequiarle Desde los 11 años Manuel Orrillo Peña grabó en su memoria el dolor de su padre, postrado ante la imagen del Señor de los Milagros. Y es que los médicos solo le daban dos horas de vida. “Ya no había nada que hacer me habían desahuciado”, recuerda el ahora Mayordomo General de la Hermandad del Señor de los Milagros.
El Cristo de los limeños se había ganado también el corazón del ahora Papa Francisco. Desde mucho antes de ser pontífice Jorge Mario Bergoglio guardaba un gran fervor por aquella pintura que dibujó un esclavo procedente de Angola en una pared de adobe en el siglo XVII, en el Perú de aquel entonces.
Con 35 años de participación en la hermandad, Orrillo prepara algunos presentes para ofrecer al Santo Padre, con motivo de su peregrinación al Perú del 18 al 21 de enero de 2018. “Ser un medio para que las personas puedan llegar al Señor es una misión especial”, así lo confesó para Aleteia durante una entrevista.
Obsequios para Francisco
Se trata de los principales elementos simbólicos de la procesión del Cristo Moreno, considerada una de las celebraciones culturales más importantes de nuestro país y de la región, que en el mes de octubre pinta las calles de morado.
Un pebetero o sahumador, que contiene el sahumerio. Una mezcla de polvillo incienso, mirra y carbón, que al contacto con el fuego genera humareda con el aroma característico que acompaña al anda del Nazareno.
Para entregarle como un segundo presente se ha considerado el “martillo de mando”, utilizado por los capataces de cada una de las cuadrillas. Este instrumento sirve para informar a los cargadores que deben elevar el anda para continuar con la procesión.
“El libro de las cantoras”, esta suerte de cuaderno es utilizado por las mujeres que acompañan al Cristo Moreno con los cantos tradicionales de la festividad.
Todos revestidos de plata, dispuestos en una maqueta que será diseñada por un escultor de la Escuela de Bellas Artes serán entregados al Santo Padre, durante su visita a la ciudad de los reyes el día 21 de enero.
El “corazón morado” del papa Francisco
Mucho antes de ser arzobispo de Buenos Aires, Francisco fue director espiritual de la Hermandad del Señor de los Milagros de la provincia de Mendoza en Argentina. Mientras que el milagro del Señor reside en la prolongación de la vida de Manuel Orrillo, para el papa Francisco esta mirada de fe de los peruanos en todo el mundo hacia el Cristo de Pachacamilla lo convirtió en uno de sus más fervientes devotos.
“Esperamos que la Hermandad del Señor de los Milagros encargada de llevar adelante esta tradicional fiesta de fervor religioso en el mundo pueda obsequiar al Papa estos tres elementos simbólicos de nuestro quehacer”, solicitó Orrillo a través de la prensa local a las autoridades organizadoras de la visita del papa Francisco al Perú, pese a que aún no se ha presentado la agenda oficial de su peregrinación, la Hermandad del Señor de los Milagros buscará que el Santo Padre llegue a visitar el Santuario de las Nazarenas y conocer la imagen original del Cristo Moreno.