De mediados del siglo VII, quizás fuera construida por el mismísimo fundador del castillo monasterio de Lindisfarne: san AidanFrente a la costa de Northumberland, en la Isla Santa de Lindisfarne, se acaba de realizar un gran descubrimiento arqueológico: unos arqueólogos han encontrado restos de una de las iglesias más antiguas de Gran Bretaña, cuya construcción se remontaría a mediados del siglo VII. Esta fue la era de la cristianización del centro y norte de Inglaterra, el resultado de una expansión monástica en las islas británicas.
El descubrimiento de esta iglesia también es importante porque, con gran probabilidad, está relacionado con las antiguas comunidades monásticas británicas que produjeron el famoso manuscrito altomedieval, los Evangelios de Lindisfarne.
Según informó The Independent, “las evidencias que indican que este podría ser el lugar de una de las iglesias originales del antiguo periodo anglosajón de la Isla Santa (quizás incluso una iglesia construida por el fundador de Lindisfarne, san Aidan) son complejas, pero convincentes”, ya que la iglesia está construida en lo que los expertos han denominado “estilo pre-arquitectónico”.
Hasta ahora, los arqueólogos han encontrado sobre todo piezas de mampostería, pero también algo que podría haber sido el altar original instalado por san Aidan mismo o por uno de sus seguidores posteriores.
La excavación también ha revelado que estos monjes pioneros escogieron la localización más desafiante y difícil para construir su iglesia, conocida en tiempos anglosajones como “el Precipicio”: un acantilado rocoso frente al palacio de san Osvaldo de Northumbria, el benefactor del antiguo movimiento monástico en Gran Bretaña. La iglesia, según recoge The Independent, “fue construida a solo dos o tres metros del borde del acantilado”.