La sociedad civil se organiza para que suceda en 10 añosCada 15 minutos ocurren cuatro homicidios en América Latina y el Caribe y cuatrocientos cada día. El dato que lo dice todo: el 38% de los homicidios a nivel mundial se concentran en la región. Un estudio reciente arrojó que en una de las zonas más duras de Caracas el 100% de los asesinatos se cometieron con armas de fuego.
La mayor parte de los asesinatos se concentra en 7 de los 20 países de la región: Brasil, Venezuela, Colombia, Honduras, Guatemala y México, en gran medida por narcotráfico.
Hay seis países del continente que se han ganado un puesto entre los trece con mayor índice de criminalidad en el planeta. México, Guatemala, Honduras, Colombia, Brasil y Venezuela. Hay que tener en cuenta que América Latina posee el 8% de la población mundial, pero es el continente más desigual y violento del planeta. No es extraño que 400 personas terminen en la morgue cada día.
En Venezuela, la situación es atípica pues desde hace casi dos décadas la violencia ha crecido exponencialmente debido a lo que ha podido llamar “belicosidad inducida” a través del discurso rudo y áspero desde el poder y la impunidad que actúa como manto protector de la delincuencia desatada.
Esta situación de violencia en el continente y de manera especial en Venezuela, ha estimulado la aparición de organizaciones de la sociedad civil y de grupos especializados en el tema que actúan de manera combinada en las zonas más críticas de la ciudad. Han logrado acercarse a las comunidades cuyos miembros, en su gran mayoría, desean superar la situación y recuperar la paz para sus vidas. Establecen una relación de confianza que les ha permitido, paulatinamente y no sin grandes riesgos, incorporar a jóvenes integrantes de bandas delincuenciales a los esfuerzos por reducir los niveles de violencia.
Desarrollan campañas de concientización para la lucha antidelictiva como la llamada “Instinto de Vida”, promovida por la “Red de Activismo e Investigación por la Convivencia” (Reacin), “Redes Ayuda”, “Caracas Mi Convive” y el portal noticioso “Efecto Cocuyo” que aporta visibilidad a los proyectos.
Llevan un año trabajando exitosamente en barriadas caraqueñas de considerable complejidad social donde la violencia es el pan de cada día. “Instinto de Vida” nació a principios del 2017 y busca visibilizar la violencia y lograr la reducción de los homicidios en 50% durante los próximos 10 años en países de Latinoamérica como Brasil, Colombia, El Salvador, Honduras, Guatemala, México y Venezuela.
Las organizaciones que apoyan la campaña de “Instinto de Vida” se han articulado en la plataforma “Acción por la Vida” en la que coinciden artistas, activistas, periodistas y familiares de víctimas, con el propósito de reducir los niveles de violencia por medio de la movilización ciudadana, la promoción de políticas públicas y la participación de los gobiernos, empresarios, medios de comunicación y ciudadanos.
Una esperanza para nuestras azotadas ciudades que nace de los propios ciudadanos, conscientes de la violencia ha sobrepasado a las autoridades y de que es de la iniciativa de la propia sociedad desde donde se generarán las soluciones que, a mediano y largo plazo, edifiquen la convivencia sobre bases de solidaridad e inclusión.-