La devoción a María en toda la ArgentinaEl 7 de octubre la Iglesia celebró a Nuestra Señora del Rosario. En todo el mundo, en cientos de comunidades, recordando a María ante imágenes distintas, pero con un patrón común: el rosario en la mano. La tradición cuenta que la Virgen María se le apareció a Santo Domingo de Guzmán en una capilla de Prouilhe, Francia, con un rosario en la mano, a la vez que le enseñó a rezarlo y lo instó a que difunda la oración por el mundo.
Con motivo de su fiesta, en la Argentina se la celebró con igual devoción por todo el país, pero siempre con un arraigo específico en cada comunidad.
En Cafayate, Salta, Nuestra Señora del Rosario de Cafayate también es conocida como “La Sentadita”. Como todos los octubres, la virgen recibió visitas de vecinos de distintos parajes de la prelatura, que la sacaron de su camarín en procesión. Sentada, como se la suele presentar en pinturas que recuerdan la aparición a Santo Domingo, viste de rojo y usa un manto azul, sobre el que recae su rizado pelo negro, que contrasta con su tez blanca. Sostiene al pequeño Niño Dios arropándolo con su brazo izquierdo, y sostiene el rosario con ambas manos, elevadas a la misma altura. La imagen de la Virgen del Rosario de Cafayate lleva más de 250 años en la ciudad, y es considerada la fundadora de Cafayate.
En Jujuy, Nuestra Señora del Rosario de Río Blanco y Paipaya recibió miles de peregrinos en su santuario, ubicado a 7 kilómetros de la capital provincial. Hay registros de devoción a la Virgen de Paipaya ya en el siglo XVII, e incluso se menciona en actas el traslado de la imagen utilizada para la Evangelización de los indios Paipaya hacia Río Blanco, donde está emplazado su santuario. La tradición incluso refiere a apariciones de María del Rosario a los indios. A diferencia de Nuestra Señora del Rosario en la vecina provincia de Salta, en Jujuy Nuestra Señora del Rosario viste de rosa, con manto celeste. Con pelo castaño claro, lleva además un bastón de mando. Otro elemento distintivo es que el rosario es sostenido tanto por María, como por el niño Dios en brazos de su madre.
También en la imagen de Nuestra señora del Rosario de San Nicolás el Niño sostiene el rosario con María su Madre, y al igual que la imagen jujeña, viste de rosa con manto celeste. Por el acontecimiento mariano que da lugar a la devoción en el pueblo de San Nicolás de los Arroyos, a la vera del Río Paraná, su festividad central no se celebra el 7 de octubre. Para conocer más de Nuestra Señora del Rosario de San Nicolás presionar aquí .
Nuestra Señora del Rosario es también patrona de Mendoza y Cuyo, y en esta advocación es presentada con el niño en brazos con la mirada siempre dirigida hacia su Madre. En Mendoza el manto azul oscuro suele estar cubierto por un largo velo blanco, que llega hasta las rodillas de la bella imagen.
Nuestra Señora del Rosario es también patrona de Azul, diócesis del interior de la provincia de Buenos Aires conocida por albergar dos grandes abadías trapenses, una masculina y otra femenina. Y patrona de la provincia de Córdoba, donde es conocida como “La negrita”, o la Virgen del Rosario del Milagro. Está imagen tiene la particularidad de estar hermanada con la del Cristo del Milagro, en Salta, ya que ambas llegaron flotando juntas a suelo americano procedentes de España en 1582, aparentemente tras un naufragio del barco que las transportaba. Viste de blanco, y es una réplica de la imagen del Santuario de Atocha, España.
En muchísimos otros parajes de la Argentina Nuestra Señora del Rosario fue celebrada con igual devoción, y de acuerdo a la tradición en cada lugar, con distintos atuendos. Pero siempre, vista cómo vista, María es bella, María es Reina, María es Madre, María es la dueña del corazón de todos.