Un mensaje del papa Francisco en el que cuenta sus experiencias más significativas durante el tiempo en que vivió en Chile Fue un “megaterremoto”. Así lo definen las crónicas de la época a la hora de mencionar al terremoto que estremeció a Chile y al mundo entero el 22 de mayo de 1960.
El epicentro del “Terremoto de Valdivia” estuvo en la zona centro-sur de 9.5 grados en la escala de Richter –el más fuerte de la historia registrado hasta la fecha- y dejó un saldo devastador de alrededor de 2.000 muertos y dos millones de damnificados, además de un tsunami y erupciones volcánicas que tuvo efectos en otros puntos del planeta.
Precisamente, aquel momento también golpeó el corazón de Jorge Mario Bergoglio, hoy papa Francisco, que entre 1959 y 1960 estuvo viviendo una etapa de su formación jesuita –el juniorado- en aquel país en la localidad de Marruecos (oeste de Santiago de Chile y actual sector del Padre Hurtado).
“Ese año, 1960, también viví de modo muy cercano la tragedia del terremoto. Buena parte de mis compañeros se desplazaron al sur para ayudar. Esto indica la capacidad que tenía la formación que se nos daba para asumir los hechos de la vida e integrarlos en nuestra vida apostólica y religiosa. Los Superiores sabían armonizar todos los aspectos”, expresó Francisco en respuesta a una carta difundida antes de su visita a Chile en 2018.
https://youtu.be/VviEMsig4r4
El encargado de hacer público esto fue el periodista y biógrafo argentino Javier Cámara, quien durante el III Encuentro para Comunicadores en la Universidad Santo Tomás compartió un mail en donde el Papa le cuenta los recuerdos más significativos durante su estadía en Chile cuando aún atravesaba su proceso de formación.
Pero además del terremoto, en la carta el Papa destaca de aquella etapa de formación que recibió en Chile “la marcada apertura al humanismo” por el modo en que estaba “encarnada” la misma.
“El equipo de formadores ayudaba a crecer en el conocimiento (intelectual, afectivo y de belleza) de la realidad. El horizonte se ampliaba y la espiritualidad ignaciana era vivida con una gran riqueza humana y espiritual. La dirección espiritual era muy bien cuidada y armonizaba el conjunto”, indica el Papa, en un mensaje también reproducido por la Conferencia Episcopal de Chile.
Por último, el Papa también recordó la figura del padre José Donosio y los cursos de historia de la cultura e historia del arte que “lo marcaron notablemente”. “Todavía conservo los apuntes de clase del p. José Donoso”, indica el Papa.
Lea carta completa:
Sr. Javier Cámara
Querido hermano:
Gracias por su correo. Respecto a lo que Usted me pregunta señalaría los siguientes aspectos:
1. Quizás lo que más me dio el año de juniorado fue una marcada apertura al humanismo. Y esto no solo por los estudios clásicos que hice, sino por el modo como estaba encarnada la formación. El equipo de formadores ayudaba a crecer en el conocimiento (intelectual, afectivo y de belleza) de la realidad. El horizonte se ampliaba y la espiritualidad ignaciana era vivida con una gran riqueza humana y espiritual. La dirección espiritual era muy bien cuidada y armonizaba el conjunto.
2. Los cursos de historia de la cultura, historia del arte, que dictaba el P. José Donoso eran de mucha categoría. Esto me marcó notablemente.
3. Y todo esto llevaba a una maduración en el ejercicio de la libertad.
4. Ese año, 1960, también viví de modo muy cercano la tragedia del terremoto. Buena parte de mis compañeros se desplazaron al sur para ayudar. Esto indica la capacidad que tenía la formación que se nos daba para asumir los hechos de la vida e integrarlos en nuestra vida apostólica y religiosa. Los Superiores sabían armonizar todos los aspectos.
5. Respecto al n.2 añado que todavía conservo los apuntes de clase del p. José Donoso.
Esto sería lo más significativo.
Quedo a su disposición. Por favor, no se olvide de rezar por mí. Saludos a su familia.
Que Jesús lo bendiga y la Virgen Santa lo cuide. Fraternalmente,
Francisco
Con información de la Conferencia Episcopal de Chile
Actualizado 22 de mayo de 2020, a 60 años de aquel terremoto