Su historia y trabajo compiten en un concurso televisivo denominado Valientes 2017 “Me habían dado tres meses de vida; experimenté el hambre”, expresa durante un reportaje de la cadena RCN Gerson Gelves Jiménez, un colombiano vinculado a la Fundación dos Peces y que se encarga de llevar alimentos a personas vulnerables que habitan las calles de Bogotá.
Esta organización -inspirada en mandatos evangélicos como el famoso “Denles ustedes de comer” (Lc 9:13)- es una iniciativa que surge en el año 2009 a cargo del sacerdote Jorge Luis Páez Cogollo de la parroquia San Buenaventura (Bogotá) con el propósito de saciar el hambre de los más necesitados, pero también llevarles una sonrisa y un mensaje.
Es ahí donde Gerson Jiménez, un valiente colombiano que logró superar un cáncer que le afectaba la zona de la laringe y que no le permitía alimentarse normalmente, decidió donar gran parte de su tiempo. Lo que lo motivó en primera instancia fue la superación de su enfermedad y el ver un día a un indigente comiendo de la basura. “Para algo me dejaron, ¡es esto!”, exclamó en ese momento Gerson.
Su historia y trabajo actualmente compiten en un concurso denominado Valientes 2017 de la cadena RCN que intenta premiar diversas iniciativas solidarias. Pero cuando se apagan las cámaras, la labor de Gerson recién empieza.
En una noche reparte 1.000 comidas y lo hace todos los viernes en las calles de Bogotá junto a un “ejército de soldados”, entre los que se encuentra su esposa.
“Yo sí peleé con Dios, pero uno ya se arrepiente de haber peleado con Dios. Yo le hice reclamos, pero luego aprendimos a hacerle la pregunta: ¿para qué? Con el tiempo hemos aprendido”, cuenta su mujer a RCN.
Gerson transporta los alimentos en una camioneta que se llama la “pecera”. Los beneficiarios de esta iniciativa son personas en situación de calle, que no tienen a veces qué comer durante el día y que suelen sentirse “menospreciados” por la sociedad.
“Antes de ser indigentes somos también seres humanos y tenemos derechos a una alimentación. De repente alguno de nosotros pudo haber tomado una mala decisión en la vida y tal vez estemos pagando las consecuencias de esa decisión. A mí me gusta la labor que el hombre desempeña porque muchas veces nos quita el hambre”, expresa uno de los beneficiarios de comida y amor durante el reportaje presentación de RCN que participa de este concurso inspirador.
La zona de influencia de esta fundación tiene que ver con Bogotá, pero también han estado vinculados a otros lugares como la Guajira o Mocoa en el departamento de Putumayo.
Hace unos meses esa localidad sufrió una devastadora tragedia tras el desborde de tres ríos que provocaron avalanchas de tierra que arrasaron varios barrios y dejaron más de 100 muertos y centenares de damnificados.
Es ahí donde Gerson y la Fundación dos Peces también se hicieron presentes. Ingresaron a los lugares más afectados llevando productos básicos y alentando a familias que lo perdieron todo.
Lo mismo sucedió en La Guajira, un lugar donde habitan centenares de indígenas golpeados por la desnutrición. Ahí también hubo traslados en caravana de miles de kilómetros para llevar alimentos a esa población necesitada y para ello contó con el apoyo del Banco de Alimentos de Bogotá, entre otros.
“Tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber. Eso es lo que hacemos nosotros, no miramos a quién”, repite Gerson, este hombre “valiente” para las cámaras y la televisión, pero más que nada sencillo y humilde de corazón cuando se apagan los flashes y se terminan los aplausos.