Difunden en el país sudamericano una ruta de atención integral para estos casos Si hay alguien que sabe muy bien de qué se trata todo esto es ella. Efectivamente, su nombre es Natalia Ponce de León y en los últimos años se ha transformado en el rostro de las víctimas de ataques con ácido en Colombia, así como de miles de ataques injustificados tanto en ese país como en el resto del continente.
El ataque a Ponce de León sucedió en el año 2014 y fue a manos de un exvecino que se había obsesionado con ella, que se consideraba un exnovio. Este hombre la agredió con ácido, la llegó a afectar dos terceras partes de su cuerpo y casi la totalidad de su rostro.
Su caso conmocionó a la opinión pública –a pesar de la frecuencia de estos actos tanto en Colombia como en otros países de otros continentes- y motivó la promulgación en el año 2016 de la denominada “Ley Natalia Ponce” con el fin de convertir las agresiones con agentes químicos en un delito en sí mismo. Anteriormente eran sancionados solamente como una lesión personal.
Pero en los últimos días la Superintendencia Nacional de Salud de Colombia fue más allá hizo pública la hoja de atención en casos de ataques con ácido u agentes químicos que está resumida en 10 pasos. Precisamente, durante el anuncio, se hizo presente Natalia, quien acompañó y valoró la puesta en marcha de esta ruta.
El objetivo, a través de la difusión de la Circular 008 de 2017, es brindar una atención en términos “de accesibilidad, oportunidad, seguridad y continuidad”, consigna la Superintendencia Nacional de Salud de Colombia.
Para lograrlo los diferentes organismos vinculados con la salud en el país sudamericano deberán acoger las instrucciones. Entre los puntos más destacados aparecen la atención inmediata, la gratuidad en la atención, el registro y reporte de las autoridades, además del seguimiento y evaluación (Ver anexo al final con todos los puntos).
“Con estas instrucciones impartidas, buscamos que estos casos tan sensibles que requieren una atención oportuna sean atendidos de manera adecuada, teniendo en cuenta que eso se convierte en un factor determinante para mitigar el daño físico y mental que sufren estas personas”, manifestó durante la presentación de la ruta el superintendente nacional de Salud, Luis Fernando Cruz Araújo, al tiempo de recordar que serán muy estrictos durante el proceso de verificación y seguimiento.
Por su parte, según reproduce El País de Cali, Natalia expresó: “Es una circular realmente muy completa y como tiene que ser. Abarca un servicio inmediato, gratuito e integral y por eso quiero agradecer a la Superintendencia”.
Esta mujer, que también lidera una fundación que busca defender los derechos de las víctimas de estos ataques, finalizó con un claro mensaje:
“Yo estoy más viva que nunca. Soy una mujer feliz y por eso invito a las mujeres a que no se callen. Hay señales de violencia sobre las que se deben pedir ayuda. No permitan que nos llamen víctimas, no merecemos ser violentadas. Sean fuertes, ámense por encima de todo”.
El abrazo más emotivo
Otra de las víctimas con ataques con ácido en Colombia es Consuelo Córdoba, una mujer colombiana que protagonizó uno de los momentos más emotivos durante la visita del papa Francisco a Colombia.
“El abrazo que el papa Francisco me ha dado, no se lo ha dado ni siquiera al presidente de la República de Colombia”, contó a Aleteia, Consuelo Córdoba, al recordar “el inolvidable encuentro” con el Pontífice en el jardín de la Nunciatura Apostólica de Bogotá el 9 de septiembre de 2017.
En ese sentido, el objetivo de Consuelo era acerarse al Papa para que le diera su visto con respecto a su deseo de someterse a una eutanasia. Sin embargo, tras aquel emotivo encuentro, la mujer desistió.
Consuelo también sufrió un ataque que la quemó con ácido sulfúrico y le deformó el rostro y la piel de gran parte de su cuerpo. Desde aquel momento ha tenido que someterse a innumerables cirugías, además de tener que cubrir su rostro con una máscara. Pero Consuelo perdonó a su agresor y también se dio una nueva oportunidad a sí misma luego del abrazo que le cambiara la vida.
A continuación la ruta de atención:
- Atención de urgencias: las víctimas tienen derecho a una atención de manera inmediata, prioritaria, gratuita y sin interrupciones en cualquier institución prestadora de servicios de salud, bien sea de carácter pública, privada o mixta en todo el territorio nacional y sin que requiera autorización previa de la EPS. No se podrá realizar cobro de copago o cuotas moderadoras a las víctimas atendidas, así como tampoco exigírsele fotocopias o autenticaciones de documentos.
- Acceso a los servicios:los servicios y tecnologías requeridos deberán garantizarse en condiciones de igualdad y oportunidad, sin que se presenten retrasos que pongan en riesgo su vida o su salud.
- Atención integral: las entidades territoriales (secretarias de salud) y EPS, a través de su red de prestación de servicios de salud públicas, privadas y mixtas, deberán garantizar la atención en todo su proceso, hasta que la víctima sale de su hospitalización y empieza su servicio de atención ambulatoria.
- Gratuidad en la atención:las víctimas tienen derecho a recibir todos sus tratamientos médicos, sicológicos, procedimientos e intervenciones necesarias para restituir la fisionomía y funcionalidad de las zonas afectadas sin ningún costo, en consecuencia, no habrá lugar al cobro de cuotas moderadoras o copagos.
- Red de servicios de salud: las entidades territoriales, EPS e IPS públicas, privadas o mixtas, deberán garantizar los siguientes servicios de asistencia:
- Atención de urgencias.
- Atención durante la hospitalización.
- Plan de atención integral ambulatorio que requiera para su recuperación.
- Remisión a la unidad de quemados.
- Servicios de apoyo diagnóstico y terapéutico.
- Valoración y rehabilitación física.
- Todos los dispositivos, medicamentos y tecnologías para comenzar el proceso de rehabilitación.
- Todas las atenciones, valoraciones, evaluaciones e intervenciones ordenadas por los médicos tratantes y por los diferentes profesionales de rehabilitación.
- Registro y reporte de las autoridades: las IPS deberán llevar un registro de los casos y reportarlos a las autoridades competentes.
- Atención en la unidad de quemados:los prestadores que cuenten con una unidad de quemados habilitada, deben contar con equipo asistencial especializado capacitado para atender este tipo de casos, el cual deberá estar conformado como mínimo por: un cirujano plástico, un médico con experiencia en cirugia de quemados, un médico especialista de acuerdo al área afectada y profesionales en terapia física, ocupacional, respiratoria y de lenguaje.
- Valoración integral de la víctima:las unidades de quemados deberán brindar atención integral a las víctimas de ataques con agentes químicos, lo cual comprende salud física, mental y rehabilitación.
- Certificado médico:la EPS a la cual se encuentre afiliada la víctima, expedirá un certificado médico en el que conste su situación y así podrá acceder a los beneficios para su integración social, laboral y el ejercicio de sus derechos.
- Seguimiento y evaluación:esta ruta integral de atención contempla obligaciones particulares en cabeza de cada uno de los actores, de la siguiente manera:
- Entidades territoriales:deben realizar seguimiento a la implementación de la ruta integral de atención realizada por las EPS y su red prestadora de servicios de salud.
- Entidades Administradoras de Planes de Beneficios: deberán evaluar la implementación de la ruta de atención en su red y realizar seguimiento a la atención integral de las víctimas.
- Instituciones Prestadoras del Servicio de Salud: las IPS deberán implementar paquetes integrales en sus unidades de quemados para la atención ambulatoria de víctimas, disponer de medicamentos e insumos y conformar un equipo capacitado para su atención.
Con información de Superintendencia Nacional de Salud de Colombia y El País de Cali