Un enfrentamiento sin cuartel y un nuevo dilema para los afrodescendientes La guerra en las favelas de Río de Janeiro, Brasil, volvió a estallar. Y esto sucedió a las pocas horas de que las fuerzas de seguridad detuvieran al narcotraficante más buscado de la ciudad, “Rogerio 157” (Rogerio Avelino dos Santos), líder criminal en la favela Rocinha.
Debido a los constantes enfrentamientos de los últimos meses en la “cidade maravilhosa”, el presidente Michel Temer ordenó el envío de las Fuerzas Armadas. Pero en los últimos días esta guerra se recrudeció y luego del episodio de la captura de “Rogerio 157” hubo muertes en la Rocinha y los vecinos temían por el aumento de la violencia.
Por otro lado, recientemente trascendió una dura protesta de Amnistía Internacional de Brasil. En ese sentido, colocaron un féretro frente al Ministerio de Justicia para simbolizar los “asesinatos contra jóvenes negros”, considerados por la organización como las “primeras víctimas de la guerra” desatada en las favelas, detalla ANSA.
“No voy a referirme a ningún gobierno en particular, ni a ningún caso en particular, lo que digo es que cuando se está en estado de guerra la muerte se banaliza”, afirmó, reproduce la agencia, Jurema Werneck, directora ejecutiva de Amnistía Internacional en Brasil.
También se refirió al respecto Joel Luiz, un joven abogado integrante de la organización.
“Es necesario que el Ministerio Público realice acciones preventivas en las favelas con alto índice de violencia. Además, es urgente la deconstrucción de la criminalización de la periferia justificada bajo el argumento de la llamada ‘guerra a las drogas’. Debe haber establecimiento de criterios para que las redadas policiales tengan en cuenta la vida cotidiana de las personas y así preservar la seguridad y la vida de los residentes”, especificó.
Por su parte, una joven manifestante señaló: “Queremos entregar un cajón simbólico al ministro (Torquato Jardim) para simbolizar los 30.000 jóvenes negros asesinados cada año, no aguantamos más, queremos tener derecho a la vida”.
Precisamente, la movilización estuvo encabezada por un grupo de jóvenes negros activistas con el objetivo de defender los derechos de esta población en Brasil.
“Estamos acá para defender un Plan Nacional de Reducción de homicidios, estamos con cinco jóvenes que representan cinco regiones del país, queremos juventud negra viva”, replicó Werneck.
Río de Janeiro es uno de los lugares turísticos más importantes del país, ciudad a la que llegan miles de turistas durante todo el año. La situación desatada debido al crimen organizado y al narcotráfico sigue siendo preocupante. Ojalá pueda volver la pacificación a una ciudad que tiene como protagonista al Cristo Redentor, imagen que desde lo alto de un morro abraza el sufrimiento de su gente.