¿Qué mejor forma para recibir el año nuevo?Termina el año. Una oportunidad para elevar nuestra mirada a Dios y darle las gracias por los dones recibidos. Esta oración puede ayudarte a unir tu corazón al Suyo.
Gracias, Señor:
Por haber llegado al final de este año creyendo, confiando y amándote.
Fueron muchas veces las que animaste mi fe,
las que corriste a mi encuentro.
Siempre sentí el calor de tu mano, aún en plena oscuridad.
Gracias, también, por esa otra fe que he conservado.
Gracias por las ayudas, la compañía
y la alegría que me han brindado las personas.
Gracias por tantos ojos como me miraron con ternura.
Gracias por tantas manos como se adelantaron a estrechar la mía.
Gracias por tantos labios cuyas palabras y sonrisas me alentaron.
Gracias por tantos oídos que me escucharon.
Gracias, Señor, por tanto como he recibido,
que no fueron méritos míos, sino dones tuyos…
Gracias por el mérito que me estimuló.
Por la salud que me sostuvo,
por el trabajo que desempeñé,
y por el descanso de que disfruté.
Gracias por aquel fracaso y aquella desilusión.
Perdón, Señor:
Por la palabra que callé.
Por esa mano que no tendí.
Por la sonrisa que escatimé.
Por el saludo que negué.
Por la mirada que desvié.
Por la disculpa que no pedí.
Por esos oídos que no presté.
Por ese gozo que no compartí.
Por tanta lágrima que no enjugué.
Por esa verdad que omití.
Por tantas veces, Señor,
como me marché de Ti o como no te abrí.
Ayúdame, Señor, quiero comenzar con fuerza
este nuevo año de mi vida.