Una mujer polaca de 80 años malvivía sola en una pequeña cabaña cerca del bosque. Hasta que recibió la visita de una joven pareja.Un día, Krzysztof Kopeć, un ingeniero de la construcción de 28 años y propietario de un Despacho de Arquitectura de Lubaczów (Polonia), llamó a la puerta de la cabaña. Junto con su esposa, Kinga, quien trabaja como arquitecta, decidió involucrarse en un “Paquete de Regalo Noble”.
De entre los más necesitados, eligieron a una mujer de 80 años de la comunidad de Wielkie Oczy [Ojos Grandes] que sólo pidió comida, un pañuelo calentito, queroseno, leña y un pequeño armario para la ropa. Los donantes decidieron verificar si necesitaba algo más. Sabían que vivía con sólo 350 zlotys (unos 84 euros) al mes.
Cuando salieron de su coche y cruzaron el umbral del cobertizo, no pudieron contener las lágrimas…
Cuando era pequeño, mis padres me contaban una historia sobre Baba Yaga, que vivía en una cabaña sostenida por una pata de gallina. Hoy visité esta cabaña.
Sin embargo, no me encontré allí, ninguna Baba Yaga, sino a una adorable anciana quien dependía de la gracia del destino y quien luchaba por sobrevivir.
La señora “abuela”, a pesar de no ver bien, aún conserva una mirada feliz y una cara sonriente. No se queja. Vive sin electricidad y sin agua en una cabaña con un área de 24 metros cuadrados.
Tengo el deseo de cambiar su vida, aunque sea un poquito. Su casa necesita ser reformada por completo, pero no me asusto, porquesé que juntos lo lograremos, escribió Krzysztof Kopeć en Facebook.
Además añadió que quería instalar el agua y la electricidad en la casa de la “abuela”, aislarla, reconstruir el cobertizo para almacenar la leña, pintar las paredes, colocar el suelo de PVC, reemplazar la cubierta del tejado y construir un inodoro externo.
Y luego comenzó la avalancha del bien.
Alguien ofreció chapas metálicas, otro trajo espuma de poliestireno y otros donaron alimentos, productos de limpieza, madera para leña y ropa.
Y así, en sólo 6 días, la cabaña de pata de gallina fue convertida en un palacio – como dice el cuidador de “la abuela”, señor Marian.
La casa está aislada del frío, tiene un nuevo techo, los suelos y la fachada y los cimientos reforzados. Por dentro está decorada con azulejos y muebles nuevos.
En la casa hay electrodomésticos de cocina y alimentos. Algunos elementos no se modificaron para que la Sra. Aniela pudiera sentirse como en casa.
Durante la reforma, la abuela se encontraba fuera de casa. Cuando regresó, la sonrisa no desaparecía de su rostro.
Estaba muy contenta de haber regresado a su casita, estaba limpia y perfumada y de encontrar sus objetos personales. (…) Reksio (su perro) está muy feliz de tener su camita, su comedero y su mantita. Creo que se acostumbró rápidamente a su casa.
La abuela recibió un andador, lo que la ayudará a moverse libremente por la casa. Nuestro objetivo era preservar algunos detalles del “viejo interior”, como una cocina embaldosada, cuadros sagrados, un reloj, fotos conservadas de la abuela y una lámpara de queroseno, para que la abuela no se sintiera extraña entre las nuevas paredes.
Aunque hayan pasado algunas semanas desde la renovación de los 6 días, Krzysztof y Kinga están en contacto constante con la Sra. Aniela. “La tratamos un poco como si fuera nuestra abuela”, le cuenta a Aleteia.
“El siguiente punto en el plan de las reformas es instalar la conexión eléctrica – agrega Krzysztof. Estoy seguro de que la abuela podrá encender la luz a fines de enero. En el caso del agua, el proyecto está listo y estamos esperando al contratista. Y luego sacaremos de las cajas los azulejos y los accesorios de baño y los instalaremos en el cuarto de baño de la abuela.”
¡Echad vistazo a los resultados de su trabajo!