Otro ejemplo más de la idea subterránea de que toda actividad, tipo de trabajo o deporte, ha de tener su héroe, su estrella o su épicaUn grupo de hombres normales viven situación peligrosa y se convierten en héroes arriesgando sus vidas. De fondo: bomberos. No lean más porque es que no hay más que leer.
Only the brave, Héroes del infierno, es eso. Es la historia de un grupo de bomberos forestales que arriesgan sus vidas en esos macro incendios que suceden en EE.UU. en los parques nacionales y alrededores. La historia es real y cuenta la epopeya de uno de esos grupos. Y ya está, en el sentido literal y cinematográfico, es que “ya está y paren de contar”: actuaciones correctas, algún efecto de cámara, alguna pincelada emocional.
Y después están todos (no uno, ni dos, sino todos) los clichés: que si hay grupos de bomberos mejores y peores y nosotros buscamos ser los mejores, que si un joven y un veterano están enfrentados, que si una redención de un joven que no se entera pero con los bomberos se hará un hombre responsable, que si todos somos una comunidad y hermandad universal que nos queremos mucho y nos ayudamos mucho (y hacemos barbacoas con camisetas), que si hay que arriesgarse uno se arriesga, que… etc, etc.
Algunos críticos la han ensalzado lo que no está escrito. Y no lo entiendo. Y mire que quien les escribe les gusta esa idea americana del héroe que lucha frente a la adversidad. Pero aquí lo que han hecho es otra cosa: es una hagiografía de un suceso y de los hombres que se vieron envueltos. Y la verdad es que no funciona.
Aquí va mi crítica:
1.- Bomberos valientes
2.- Héroes bomberos valientes
3.- Que buenos somos los bomberos valientes.
4.- Cuánto amamos nuestro país y qué valientes somos los bomberos.
5.- Como nos queremos (y más aún si eres un bombero valiente).
Héroes del infierno es otro ejemplo más de la idea subterránea de que toda actividad, tipo de trabajo o deporte, ha de tener su héroe, su estrella o su épica. Y que en ese relato se basa la leyenda de lo bueno y lo mejor de esa actividad: jugadores de hockey, bomberos, cocineros, carteros, periodistas, lo que se les ocurra. En el caso de esta película, se trata de una épica trágica, pero épica. Los bomberos son un oficio casi militar y heroico en EE.UU. Policías y bomberos son los bandos modélicos y hermanados del intrahéroe americano. Y más si se trata de una historia real.
Como la película es trágica en su final y verídica en su narración, cobra mayor relevancia emocional y mayor tributo histórico: honrar a quienes se sacrifican por los demás. Y eso es digno de ensalzar. Pero, al mismo tiempo, eso no la convierte en buena película.
A veces se cuela entre las buenas películas de ese género pseudo-épico algo como esto, y no es que sea mala, pero de donde no hay no se puede sacar. Y, en el fondo, todo esto no es por no querer decir más, sino que más bien esta película no sólo pertenece a aquellas películas que echan los domingos por la tarde en la tele, sino a esas otras de las que uno cambia de canal a los cinco minutos.
Ficha Técnica
Título original: Only the brave
Año: 2017
Duración: 134 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Joseph Kosinski
Guion: Ken Nolan, Eric Warren Singer
Música: Joseph Trapanese
Fotografía: Claudio Miranda
Reparto: Josh Brolin, Miles Teller, Jeff Bridges, James Badge Dale, Taylor Kitsch, Jennifer Connelly, Andie MacDowell, Scott Haze, Ben Hardy,