En la tarde la visita para saludarlo por la Pascua y que tuvo lugar en el monasterio Mater Ecclesiae, en los Jardines VaticanosEl papa Francisco salió al encuentro de su predecesor, Benedicto XVI, para darle su saludo por la próxima Pascua, confirmó la Oficina de Prensa de la Santa Sede este 27 de marzo de 2018. La visita se llevó a cabo después del escándalo debido a la manipulación de una carta de Joseph Ratzinger, que concluyó en la renuncia del ‘ministro de comunicaciones’ del Vaticano.
El abrazo de los dos papas es un signo concreto de la señalada ya por Papa Benedicto XVI como una “unión interior” entre los dos pontificados. En efecto, el Papa latinoamericano y el Papa europeo se habían encontrado en otras ocasiones, desde que este último renunciara por ‘falta de fuerzas’ en el mes de febrero de 2013.
La Semana Santa y la Navidad – dos fiestas católicas muy sentidas – son motivos de encuentro fraterno entre los dos Sucesores de Pedro. Bergoglio ha definido ‘Benedicto’ el ‘abuelo sabio’ que brinda su compañía en casa (el Vaticano). En efecto, el próximo 16 de abril, Benedicto XVI cumplirá 91 años.
Sobre la carta del papa Emérito hecha pública en ocasión de la presentación de la colección ‘La teología del Papa Francisco’, se leyó una parte en relación con la iniciativa, en particular el pasaje del apoyo del Papa Emérito sobre la formación filosófica y teológica del actual Obispo de Roma y la unión interior entre los dos pontificados, descuidando las anotaciones relativas a los contribuidores de la colección.
La opción de dar a conocer una parte de la carta estuvo motivada por el “carácter reservado” y no por algún “intento de censura”, según se indicó en un comunicado del 17 de marzo de 2018.
Horas antes, un periodista italiano, contrario desde siempre al pontificado de Francisco, filtró la existencia de otro párrafo omitido, en el que Benedicto XVI expresaba, en su opinión, la inapropiada elección de uno de los encargados de la colección, el teólogo alemán Peter Hünermann, que dirigió críticas en el pasado contra el mismo Joseph Ratzinger y su predecesor Juan Pablo II en materia de teología moral.
En este contexto, la prensa internacional denunció la manipulación ‘censora’ de la fotografía distribuida como ajuar fotográfico para acompañar las imágenes de los libros ya mencionados.
Así, los dos Pontífices se encontraron a dos semanas del escándalo que empujó al Vaticano a hacer pública la “carta por entero” de Benedicto XVI y que motivó la renuncia del prefecto de la Secretaría para la Comunicación, Dario Edoardo Viganò, aceptada por Francisco el 21 de marzo de 2018.
El entonces ‘ministro de comunicación’, en una misiva del 19 de marzo, le pidió al actual Pontífice que aceptara su renuncia para evitar “retrasar, dañar o incluso bloquear” la reforma de la Curia que el actual Pontífice está llevando a cabo.
En este sentido, Francisco aceptó la renuncia de Viganò a través de una misiva en la que indicó que respetaba su decisión y acogía, “no sin cierto pesar, su dimisión como Prefecto”. “Le pido que permanezca en el Dicasterio, para lo cual le nombro Asesor del Dicasterio de la Comunicación para poder dar su contribución humana y profesional al nuevo Prefecto en el proyecto de reforma querido por el Consejo de Cardenales, por mí aprobado y regularmente compartido”.