Alberga en Santa María de la Fe antiguos tallados hechos por nativos guaraníes que fueron rescatados en tiempos complejosUbicada en el departamento de Misiones, Paraguay, a más de 250 kilómetros de la capital, Asunción, Santa María de Fe es una pequeña localidad inmersa en la Ruta Jesuítica paraguaya.
Es en ese lugar donde, a un costado de una famosa plaza repleta de monos aulladores, se encuentra el Museo Diocesano de Artes Jesuíticas Santa María de Fe, un lugar establecido en una casa indígena y que sirvió de resguardo del rico pasado cultural y religioso.
A través del recorrido por sus diferentes salas es posible contemplar parte del legado de las misiones jesuíticas en América Latina a través de imágenes barrocas (en total 56), en su mayoría de santos –además de ángeles y arcángeles-, hechas junto a aprendices guaraníes.
Una de las representaciones más destacadas en una de las seis salas (única en los 30 pueblos jesuíticos de Sudamérica) tiene que ver con un “muy elaborado” Nacimiento del Niño Jesús (pesebre o Belén) donde se puede observar la inclusión de animales silvestres de Paraguay como la perdiz y el jabalí, según comenta la guía local Irma Ramírez en un reciente informe reproducido por Última Hora.
La gente protegió las imágenes
En el año 1889 un incendio destruyó la iglesia original del lugar, pero gran parte de las imágenes se pudieron salvar. La reducción jesuítica data del año 1637, pero debido al acoso de bandeirantes portugueses tuvo que trasladarse en el año 1669 al lugar que ocupa actualmente en Santa María de Fe, recuerda el sitio web de los Jesuitas en Paraguay.
La Guerra de la Triple Alianza (1864-1870) también tuvo incidencia en la situación, famoso enfrentamiento regional que generó que el lugar quedara abandonado y el tiempo entrara en etapa de deterioro. Sin embargo, varias personas fueron las responsables de proteger las imágenes talladas en madera hechas por los indígenas, algo que terminó con el correr del tiempo con el establecimiento del Museo Diocesano de Artes Jesuíticas de Santa María de Fe.
El horario del museo, muy flexible para la visita de turistas provenientes de diversas partes del mundo, es una clara invitación para conocer un lugar que se ha transformado en guardián del talento jesuita y guaraní en una pequeña localidad paraguaya, y que representa un punto más de atracción de la gran Ruta Jesuítica distribuida en varios países de Sudamérica.
Con información de Jesuitas de Paraguay y Última Hora