¿Puede un robot tener responsabilidad?Hace falta antes de nada evitar pensar que las máquinas sean simples instrumentos que pueden ser utilizados para bien o para mal. Las cosas no son tan sencillas.
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La utilización de las máquinas transforma al hombre. Piensen lo que conlleva el uso de un teléfono celular, por ejemplo.
Sin querer afirmar que estamos exentos de responsabilidad ante una máquina o un robot pero es muy importante tomar en consideración las siguientes cuestiones a la hora de analizar el asunto en cuestión:
El mundo de la técnica, del progreso científico-tecnológico y de las telecomunicaciones se mueve según leyes ya autónomas, sobre las cuales el hombre no tiene capacidad de incidir. Aún así, este contexto tecnológico en el que estamos inmersos no nos quita responsabilidad. De hecho, podemos incidir al menos localmente, en nuestro campo de acción, sobre los efectos de esta tecnología global, por ejemplo utilizando o no determinados instrumentos.
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Tampoco podemos pensar que no tenemos responsabilidad respecto a las consecuencias de las actividades de máquinas que utilizamos por el hecho de no haberlas producido o programado. Es fácil pensar que es sobre el constructor o el programador sobre el que recae la responsabilidad directa. Hay una responsabilidad indirecta que recae sobre quién acepta utilizar la máquina. La utilización simple tiene sus reglas y el sujeto las acepta. Por ello, él también es responsable (como cuando aceptamos suscribir las condiciones de un software descargado gratuitamente).
Es necesario, entonces, distinguir la responsabilidad de la construcción, la de la programación y la del uso.
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Pensamos por ejemplo en los learning robots, las máquinas dotadas de autorregulación, con cierta autonomía para tomar decisiones. Desde un punto de vista ético, en la relación hombre-robot hemos pasado del modelo “master–slave”, al modelo “companion–companion”. Esto ha reducido ciertamente la capacidad de control del hombre y, en consecuencia, su responsabilidad directa. Pero no ha eliminado su responsabilidad en una forma indirecta.
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Existen diferentes sentidos del término “responsabilidad”, pero el hombre, como sujeto moral, no puede librarse totalmente de esta responsabilidad. Justamente porque es un sujeto moral, resulta responsable.
No se trata de ser optimistas, ni de ser pesimistas en relación a los progresos de las tecnologías y de sus aplicaciones. Se trata, solo de ser responsables. O sea, de ser conscientes que el hombre es un sujeto ético, en todos los significados que esta expresión puede asumir, dejando claro el concepto que la tecnología, de por si, es un bien para la humanidad. El tema esencial es el uso que hacemos de ella.