La narrativa de Marvel Studios desemboca en este filme ambicioso y climático, que reúne a (casi) todos los superhéroes de la productoraEn la industria de los cómics de superhéroes, los llamados crossovers –esto es, los ciclos argumentales que entrecruzan los caminos de varios personajes distintos– tienen una función comercial muy marcada: impulsar a los lectores a comprar colecciones que habitualmente no adquieren para completar la trama global, y así, con un poco de suerte, captar su atención sobre algún otro de los productos de la compañía.
En cambio, para los aficionados, el crossover es una auténtica celebración, un evento que eleva el nivel de las amenazas a las que habitualmente se enfrentan sus héroes favoritos, y que les permite alcanzar victorias épicas que llevan sus capacidades al límite.
Desde esa doble perspectiva hay que entender Vengadores: Infinity War: por un lado, como un premio en forma de largometraje para los fans más recalcitrantes de Marvel Studios, que han podido ver cómo durante una década las producciones de la compañía se encaminaban hacia el enfrentamiento con Thanos (voz y captura de movimiento de Josh Brolin); y por el otro, como un producto más de la fábrica de blockbusters de Walt Disney Studios, pensado para arrastrar al cine a los seguidores de todas y cada una de sus franquicias superheroicas.
Lo que obliga tanto a los hermanos Anthony y Joe Russo como a sus guionistas, Christopher Markus y Stephen McFeely, a hacer auténtico encaje de bolillos a la hora de mezclar sagas y personajes de tonos e intenciones muy distintos, esforzándose –en algunos casos, de forma infructuosa– por darle peso específico y algún momento de lucimiento a todos ellos, pero sobre todo incrustarlos dentro de la trama global sin que haga aguas por todos lados.
Se trata de una limitación heredada de los crossovers comiqueros que allí se resuelve desarrollando las historias individuales en colecciones paralelas… A lo que, sin embargo, no pueden agarrarse los responsables de Infinity War, que deben desarrollar en dos horas y media –que no resolver: eso ocurrirá en la secuela que se estrenará el año que viene– el conflicto más grave al que se han enfrentando los superhéroes del Universo Cinematográfico Marvel.
De ahí que el tono sea mucho más angustioso y apesadumbrado de lo que es habitual en las producciones de la compañía: más cerca de La venganza de los Sith, por ese poso de desesperación y de destino inevitable que parece caer sobre todos los protagonistas de la función, que de El imperio contraataca, pese a compartir final abierto (y doloroso).
Esto obliga a reducir al mínimo los conflictos individuales de los personajes, y limitar las tensiones a algún chascarrillo chistoso que otro: como buen reflejo que los superhéroes suponen de lo positivo del ser humano, las diferencias quedan, en este largometraje, apartadas para poder unir fuerzas a la hora de enfrentarse a ese mal mayor que supone Thanos –salvo, claro está, una relación fundamental que Markus y Feely se han reservado para resolverla en la siguiente entrega–.
El hecho de que haya tanto en juego, y tanto terreno argumental que cubrir, hace que Vengadores: Infinity War sea, más que una narración convencional, una concatenación de clímax, de momentos fuertes, que nos arrastran hacia los varios enfrentamientos que sus protagonistas tienen contra el Titán Loco.
Claro que, lo que sobre el papel pueden parecer un defecto, acaba siendo una de las grandes virtudes del largometraje, porque le confiere un ritmo continuo, imparable –que, por esa continua utilización de los cliffhangers al estilo de los viejos seriales de aventuras, alude más que nunca a las producciones de George Lucas–, que hace que sus 149 minutos transcurran como una exhalación.
Sí, seguramente a nivel creativo se le podría haber pedido bastante más al proyecto –por ejemplo, un poquito más de fidelidad al crossover que lo originó, “El guantelete del infinito”, y que escribió Jim Starlin–, pero entonces no estaríamos hablando, con todo lo que ello implica, de una producción de Marvel Studios.
Ficha Técnica
Título original: Avengers: Infinity War
Año: 2018
País: Estados Unidos
Género: Superhéroes
Directores: Anthony Russo, Joe Russo.
Intérpretes: Robert Downey Jr., Chris Hemsworth, Mark Ruffalo, Chris Evans, Scarlett Johansson, Benedict Cumberbatch