La salida al conflicto generado en el país latinoamericano sufre un nuevo revés“Como mediadores y testigos lamentamos vernos obligados debido a la falta de consenso a suspender, por ahora, esta mesa plenaria del diálogo nacional”.
Con estas palabras la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) ha decidido ponerle una pausa a diálogo nacional iniciado la semana pasada entre el gobierno de Daniel Ortega y otros sectores sociales (empresarios, estudiantes, universidades, trabajadores, entre otros).
Luego de ser sometidas a votación algunas propuestas del gobierno -como la suspensión de los tranques que garanticen la libre circulación, así como el cese inmediato de todos los actos de violencia- y de los sectores sociales, el resultado final no fue favorable, las partes no llegaron a un acuerdo y quedó sin consenso.
Sin embargo, a pesar de esta decisión, la propia CEN propuso la conformación de una “comisión mixta” integrada por seis personas –tres por cada parte- “con el objetivo de que logren un consenso para superar este impase”.
“Cuando hayan logrado este consenso les rogamos nos lo comuniquen para poder reiniciar el diálogo y nuestro servicio de mediación”, concluyen.
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La situación ya se presentaba compleja previo al inicio de la tercera jornada de diálogo, momento en que trascendió una denuncia de “amenazas de muerte a obispos y sacerdotes” a través de medios oficialistas y redes sociales.
Esto fue confirmado también mediante un comunicado donde se menciona de forma particular el caso del obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio José Báez.
“A pesar de estas amenazas, recordamos a los agresores que somos un cuerpo colegiado y que si se ataca a un Obispo o a un Sacerdote se nos ataca a la Iglesia, y que no renunciaremos a acompañar en esta hora decisiva a y a todo el pueblo nicaragüense que bajo el azul y blanco de nuestra bandera han salido a las calles a reclamar sus justos derechos”, recordaban en el comunicado.
Comunicado de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, 22 de Mayo 2018. pic.twitter.com/g19rJn10Xf
— Conferencia Episcopal de Nicaragua (@CENicaragua) May 22, 2018
Este hecho generó rápido repudio y el propio Báez también comenzó a recibir muestras de apoyo y solidaridad. Recientemente, luego de conocida la noticia sobre la suspensión del diálogo, el propio Báez agradeció la confianza depositada en la mediación de la Iglesia.
Los Obispos de Nicaragua aceptamos con fe en Dios ser mediadores en el Diálogo Nacional, dimos de corazón capacidad y tiempo para llevarlo adelante, arriesgamos hasta la vida, fuimos transparentes con el pueblo y actuamos con gran amor al país. ¡Gracias a todos por su confianza! pic.twitter.com/xgyv42IiaZ
— Silvio José Báez (@silviojbaez) May 24, 2018
En tanto, con la decisión de ahora habrá que seguir esperando qué sucederá en un país que por ahora no encuentra a una salida a la crisis. De momento la Iglesia, con rol protagónico a la hora de hallar una solución como puente entre las partes, seguirá procurando que esta medida sea transitoria y las partes puedan volver a sentarse en una mesa de negociación.
