La invitación es a través de una muestra artística que representa un auténtico encuentro entre arte y Creación ¿Alguna vez te has imaginado caminar por un vasto desierto de color blanco? El artista chileno Hernán Cruz no solo lo pensó, sino que también lo concretó. Para ello decidió emprender una larga travesía por los salares de Bolivia y Chile, entre ellos el majestuoso Uyuni, así como el Colpasa, El Laco y Surire.
Luego de dos años de contemplación y recorrido dividido en tres viajes, finalmente todo quedó plasmado pinturas, dibujos, fotografías, videos, testimonios y cuadernos de artista a través del proyecto “Mares Blancos”, una exposición que se lleva a cabo por estos días en el Museo de Artes Visuales (Mavi) de Santiago de Chile.
Pero la aventura por los majestuosos salares que ofrecen países como Bolivia y Chile guarda otra peculiaridad de parte de este artista, quien ha dejado su huella a lo largo de su camino por estos salares a través del desarrollo de intervenciones artísticas.
Esto también se conoce como “Land-art” (obra instalada de forma temporal sobre un territorio), un claro ejemplo de enlace entre “arte y Creación”.
“Me baso en la experimentación de la materia (espesura) y en la concreción de la línea (trazos); desarrollando un lenguaje pictórico abstracto donde la mancha delineada es el tamaño junto con destellos de pigmentos, de líneas y trazos; desafiando el informalismo gestual”, señala el artista al hacer referencia a ese proceso de reconstrucción de “huellas”, reproduce la web del Mavi.
La presencia de tierras de origen mezclada con otros materiales también forma parte de la propuesta de la muestra.
“Trabajo con aceites, pigmentos, arenas y tierras que se vierten sobre superficies (arpilleras, paños, totoras, cartones, papeles, metales) para alcanzar la materia pictórica”, indica este autor, quien en el año 1980 comenzó a trazar sus primeros dibujos y pinturas abstractas de fuerte color sobre papel.
Pero con el correr de los años, la investigación y nuevas obras pictóricas, este autor decide emprender el camino de “acciones de arte con viajes a través de ciudades y territorios que abordan lo abstracto con lo vasto”.
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“Mares Blancos”, una muestra que permanece hasta el 15 de julio, se puede apreciar en Chile, pero también representa una invitación para descubrir la inmensidad de los salares del altiplano a través de una mirada artística. En definitiva, una buena oportunidad para contemplar las maravillas de la Creación y transformarlas en alabanzas.
