Fue uno de los rostros imprescindibles de la comedia de los 80 pero la trágica muerte de su mujer lo llevó a alterar sus agenda para entregarse en cuerpo y alma a sus dos hijosPuede que su nombre no diga gran cosa al gran público en general pero su rostro es de sobra conocido. Saltó a la fama interpretando a Louis Tully, el vecino pelmazo que acosaba constantemente a Sigourney Weaver en Los Cazafantasmas con una interminable verborrea que no importaba a nadie.
A partir de entonces y con, tal vez, la única excepción de Calles de fuego, su nombre estuvo vinculado a la comedia con títulos como El gran despilfarro, La tienda de los horrores, La loca historia de las galaxias o Cariño, he encogido a los niños.
Sin embargo, en 1997 la vida le dio un duro golpe a Moranis y su mujer, Anne Moranis, falleció de cáncer de mama. A partir de ese momento, el actor se replanteó su vida profesional. Solo aceptaba trabajos que no lo alejaran de casa demasiado tiempo y que le permitiera estar con sus hijos.
En estas condiciones rodó Cariño, he agrandado al niño y Los picapiedras, pero no era suficiente para atender a los pequeños que de un dia para otro se habían quedado sin madre. De este modo Moranis tomó una decisión salomónica y se alejó de Hollywood. Sus hijos eran lo primero.
“Pasé de eso a estar en casa con un par de niños pequeños, que es un estilo de vida muy diferente. Pero fue importante para mí. No me arrepiento en absoluto. Mi vida es maravillosa” (The Hollywood Reporter).
Desde entonces ha prestado su voz en películas como Hermano Oso y ha trabajado en prensa, radio y televisión explotando su extraordinaria vis cómica. A pesar de todo, Moranis todavía podía hacer reír a los demás.
Actualmente, con 65 años y con unos hijos que ya han crecido y que pueden desenvolverse solos, Moranis se está planteando volver al mundo del cine.
Lo hace, eso si, esperando el proyecto adecuado. No tiene prisas por ponerse frente a una cámara. De hecho, se negó a aparecer en la nueva versión femenina de Los cazafantasmas: ahora Moranis quiere cosas con valores. La familia es lo primero.