Este fin de semana hubo marchas en diversas poblaciones mexicanas, para manifestar rechazo a iniciativas de ley para legalizar el aborto y la eutanasia a nivel nacionalDesde hace unos meses, la polémica en torno a la despenalización del aborto a nivel federal en México ha desatado una batalla donde los colores son las insignias de quienes defienden la vida del no nacido y de su madre y entre quienes están a favor de la legalización y optan por el así llamado derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo.
Estas últimas han usado los pañuelos verdes mientras que la defensa de la vida se ha convertido en una “ola” de color azul celeste, misma que ha inundado las calles de las principales ciudades mexicanas el pasado sábado, bajo la consigna de salvar las dos vidas, la del no nacido y la de su madre.
En efecto, diversas organizaciones pro vida, integradas en las iniciativas “Ola Celeste México” y “Salvemos las Dos Vidas”, propiciaron marchas en diversas poblaciones mexicanas, para manifestar su rechazo a iniciativas de ley que buscarían, entre otras medidas, legalizar el aborto y la eutanasia a nivel nacional. Se calcula que fueron poco más de cien marchas las que ayer sábado se llevaron a cabo.
“Son manifestaciones de descontento por los ataques a la vida que algunos legisladores han llevado a cabo en las últimas semanas a través de iniciativas que buscan promover el aborto, incluso a nivel constitucional”, expresó María José Berrueta, presidenta de “Pasos por la Vida”, una de las asociaciones que participaron la Marcha.
Por su parte, Rodrigo Iván Cortés, presidente del Frente Nacional de la Familia, quien aglutina a los organismos que se manifestaron ayer en las calles del país, dijo: “México no necesita más muerte, necesita más vida; México no necesita que se debilite más el tejido social y la familia, necesita que se fortalezca”.
La frase que unió la “Ola Celeste” fue “Defendamos la vida de todas y todos”.
Cabe señalar que algunos legisladores del Partido de la Revolución Democrática y del partido que respalda al presidente electo Andrés Manuel López Obrador (Movimiento de Regeneración Nacional) han expresado la posibilidad de que el aborto se legalice en todo el país.
Por su parte, la futura secretaria de Gobernación (del Interior), la ex ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Olga Sánchez Cordero ha resumido la idea que se manejará a partir del 1 de diciembre, cuando el nuevo régimen entre en funciones: no al aborto pero no a la penalización de las mujeres que lo practiquen.
En una reciente charla en el Tecnológico de Monterrey, Sánchez Cordero delineó, personalmente, esa postura: “Aquí tengo mi pulserita que tiene siete nietos, por supuesto que yo no estoy a favor del aborto”, para después añadir: “Lo que no quiero, y mi vida va de por medio, es que a las mujeres las priven de la libertad durante treinta años”,
Hasta el momento, “la interrupción del embarazo” solamente es legal en la Ciudad de México hasta las doce semanas de gestación. Desde 2007 se han registrado en la capital del país cerca de 200.000 abortos.
Los 31 estados restantes que componen la República Mexicana, no solamente no lo han incorporado en sus constituciones locales, sino muchos de ellos han legislado “blindado” la vida desde la concepción hasta la muerte natural.