Cada país tiene sus propias tradiciones populares para desear cosas buenas
Aunque en el fondo todos los seres humanos, sin importar la nacionalidad que tengamos, compartimos el mismo deseo de tener un nuevo año lleno de felicidad, salud, prosperidad y metas alcanzadas, es interesante ver cómo cada país tiene sus propias tradiciones populares para desear cosas buenas.
Así es como se celebra el Año Nuevo en distintas partes del mundo:
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Las 12 uvas (España y Latinoamérica)
Esta tradición, que consiste en comer 12 uvas (una por cada mes) a la medianoche con cada campanada y pidiendo 12 deseos, nació en España y luego se expandió a algunos países de Latinoamérica.
Hay dos teorías acerca de esta práctica. La primera que la clase alta española comía uvas y tomaba champagne para emular a los franceses y poco a poco se fue expandiendo a las clases no tan pudientes.
Y la otra es que a principios del siglo XX, los productores de uva de Alicante tuvieron una muy buena cosecha y como una especie de estrategia de mercadeo para el excedente, además de un buen precio, las vendían como las “uvas de la buena suerte”.
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Un baño de agua fría (Holanda)
El primero de enero, en distintas ciudades del país, las personas no le prestan atención a las bajas temperaturas y se bañan en diferentes playas y lagos con divertidos trajes u originales sombreros, siendo Scheveningen es uno de los sitios más populares para comenzar el año bien “fresco”.
Otros países se han sumado a esta tradición, como Alemania y Estados Unidos (este último con su famoso polar bear plunge), e incluso, a veces hasta se hace con fines benéficos.
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Salto de suerte (Dinamarca)
Para los daneses, el discurso de la reina Margarita II a comienzos de la tarde marca el inicio de la celebración, pero otra de las tradiciones que muchos acostumbran seguir es dar un brinco en la medianoche (puede ser saltar desde una silla o hasta del propio sofá de la casa) para también saltar así las adversidades que puedan surgir en el nuevo año.
Si de comida se trata, no puede faltar el Kransekage, un dulce que consiste en varios aros de mazapán colocados unos encima de otros.
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Un buen plato de lentejas (España e Italia)
Particularmente en estos dos países europeos es muy común cenar lentejas en la víspera del Año Nuevo para “atraer” prosperidad.
¿De dónde viene esto? En la Antigua Roma, las lentejas eran de las legumbres más cotizadas y hasta se acostumbraba entre amigos y familiares regalar un puñado de lentejas en una pequeña bolsa de cuero para desearles que se convirtieran en oro.
Por la cantidad de inmigrantes, especialmente después de la Segunda Guerra Mundial, en muchos países latinos también se ha adoptado esta suculenta costumbre.
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Ropa interior de colores (Latinoamérica)
En varios países de Suramérica se acostumbra a elegir el color de la ropa interior que se va a usar el 31 según lo que más se desea para el año siguiente.
Por ejemplo, si se desea conseguir el amor, debe ser roja; y si se quiere abundancia económica, amarilla. En Argentina y Uruguay, las mujeres utilizan ropa interior rosa para la buena fortuna y, si se les fue obsequiada, mucho mejor.
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Quema del muñeco (Ecuador)
Grupos de amigos o familias hacen un muñeco (o monigote, como ellos le llaman) para representar al año que termina y lo queman como para simbolizar que lo malo que haya ocurrido no se repita o te persiga en el próximo año.
En algunos casos, incluso se hacen muñecos imitando personajes (particularmente políticos) que hayan sido negativos para desear que rectifiquen o salgan de sus cargos. Esta tradición también se hace en otros países de Suramérica, como Colombia y Perú.
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El salto de las olas (Brasil)
Muchos aseguran que el mar sana y purifica (mayormente por su alto contenido de sal), pero los brasileños se meten en él a medianoche y saltan 7 olas para simbolizar el paso de las dificultades y pedir 7 deseos.
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Tarjetas y bonos (Francia)
Los franceses no suelen enviar tarjetas en Navidad, pero sí en Año Nuevo para expresar sus buenos deseos a sus seres más queridos (a mano o digitalmente). También acostumbran a dar pequeños bonos monetarios (étrennes) a las personas que les han servido y ayudado durante todo el año, como al conserje, el cartero, recolectores de basura, ayudantes del hogar, entre otros.
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Equipaje vacío (Latinoamérica)
¿Quieres viajar en el 2019? Muchos latinoamericanos acostumbran a salir a la calle (o al pasillo de sus edificios) después de las 12 campanadas con sus maletas vacías para que se cumpla.
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Vasilopita (Grecia)
Así se llama la torta que los griegos realizan únicamente para el Año Nuevo. Dentro de ella se coloca una moneda y, a quien le toque, tendrá particular suerte.
Además, es interesante que los griegos cortan las torta según la cantidad de personas que estén en la celebración y los pedazos se reparten por edad: primero a las personas mayores y luego a los más jóvenes.
Asimismo, se cortan pedazos simbólicos para personas que hayan fallecido, los menos favorecidos, Dios, La Virgen y algunos santos, como San Basilio, cuya fiesta es precisamente el 1 de enero y, como es una especie de Papá Noel, también se hace intercambio de regalos.