Mons. Lebrun, arzobispo de Ruan, será parte civil en el procedimiento relativo a posibles cómplices de los asesinos del padre Jacques Hamel. Un reconocimiento que podrá “alimentar el procedimiento canónico con vistas al reconocimiento del martirio del padre Jacques Hamel”, precisa la diócesisEmmanuelle Robinson, jueza encargada de la instrucción del procedimiento relativo a posibles cómplices de los asesinos del padre Jacques Hamel, ha declarado admisible la constitución en parte civil de Mons. Dominique Lebrun.
Mons. Lebrun presentó ante la Justicia una solicitud en este sentido en octubre de 2017. “Se reconoce así el perjuicio moral del arzobispo tanto personal como en calidad de representante de la Asociación Diocesana”, subraya la diócesis.
Alimentar el proceso canónico
En concreto, “el arzobispo de Ruan podrá estar al corriente del caso a través de su abogado, aunque la instrucción sigue estando bajo secreto de sumario en esta fase”, precisa además el obispado. Se trata de un elemento de gran importancia, pues “podría permitir, a largo plazo, alimentar el proceso canónico con vistas al reconocimiento del martirio del padre Jacques Hamel”.
En efecto, esta singular iniciativa no se inscribe en una preocupación de compensación clásica, sino que está “esencialmente al servicio del proceso de beatificación que debe establecer las circunstancias de la muerte, en particular los diálogos que mantuvieron los asesinos con las personas presentes”, indicó Mons. Dominique Lebrun en una entrevista concedida a Le Figaro el pasado mes de mayo. “La Justicia francesa es más competente que yo para recabar estos elementos –valoró–. Sin embargo, para tener acceso al expediente penal, hay que constituirse en parte civil”.
En el otoño de 2016, el papa Francisco, conmocionado por este asesinato de un hombre predicador de la paz y del diálogo entre religiones, aceptó excepcionalmente que se redujera el plazo antes del inicio del proceso de beatificación, habitualmente establecido en cinco años tras el fallecimiento.