El Pontífice durante el ángelus al final de la celebración del Domingo de Ramos recordó a los jóvenes vivir cotidianamente las indicaciones de la reciente exhortación apostólica: Christus vivit, Cristo Vive. “Renuevo mi llamamiento a los jóvenes y a todos para que recen el Rosario por la paz, especialmente por la paz en Tierra Santa y en el Medio Oriente”, dijo el Papa Francisco al final de la celebración del Domingo de Ramos y la Pasión del Señor, antes de la Bendición Apostólica, luego de la recitación del Ángelus con 50.000 fieles y peregrinos presentes en la Plaza de San Pedro, según la Gendarmería vaticana.
Francisco rezó a la Virgen María “para ayudarnos a vivir bien la Semana Santa” y saludó a los fieles presentes y a los espectadores que se unieron a través de los varios medios de comunicación.
En especial, se dirigió a todos los jóvenes que hoy, en torno a sus Obispos, celebran la Jornada Mundial de la Juventud en todas las diócesis del mundo.
“Queridos jóvenes, les invito a hacer vuestras y a vivir en la cotidianidad las indicaciones de la reciente Exhortación Apostólica Christus vivit (Cristo vive), fruto del Sínodo que también involucró a muchos de sus compañeros”.
En este texto, aseguró, “cada uno de ustedes puede encontrar señales fructíferas para su vida y su viaje de crecimiento en la fe y en el servicio a sus hermanos”.
Así, en el contexto de este domingo, el Papa ofreció a los jóvenes reunidos en la Plaza de San Pedro una corona especial del Rosario.
“Estas coronas de madera de olivo se hicieron en Tierra Santa expresamente para el encuentro mundial de la Juventud en Panamá, el pasado mes de enero”, y recordó su significado relacionado igualmente a la Jornada Mundial de la Juventud, celebrada en las diócesis.
Por lo tanto, renovó su llamado a los jóvenes a rezar por la paz del mundo, usando el “Rosario por la paz”.
