El papa Francisco animó a que se mantenga vivo el "espíritu de la solidaridad" (también en el deporte) y la formación de los jóvenes a la alegría, la diversión, el juego, que pasa a través de una "participación activa en el desarrollo de la vida social y cultural de la comunidad".
Francisco citó el Evangelio de Mateo donde Jesús dice que "los últimos serán los primeros".
E indicó que en la vida, como en el deporte, no se tiene que vencer siempre, sino que debemos de tener claro a dónde estamos yendo y a dónde nos llevan nuestros esfuerzos.
Se lo dijo a los participantes en el Encuentro promovido por la Liga Nacional de Aficionados de fútbol de Italia, a quienes recibió el 15 de abril 2019 en la Sala Clementina del Vaticano.
Amar, mirar con bondad
Francisco dijo que es importante saber qué estamos buscando y poner amor y bondad en cualquier cosa que hagamos.
"Siempre debemos esforzarnos por aclarar los objetivos que nos impulsan a levantarnos y trabajar todos los días…
No significa que siempre podamos ganar (no sería realista), sino que debemos tener claro a dónde vamos y hacia dónde nos llevan nuestros esfuerzos….".
"Jesús ciertamente no quiere decir que debemos tratar de perder, sino simplemente que debemos amar y hacer todo con una mirada de bondad sobre las personas y las situaciones.
Esto significa, por lo tanto, hacerse últimos, aprendiendo a ver la belleza incluso en las cosas más pequeñas y tratar de aceptar nuestros límites con serenidad".
"Mentalidad solidaria"
El Papa ofreció su interpretación de las palabras de Jesús "los últimos serán los primeros":
"Tender la mano a los que han caído o sufrido una falta; significa no denigrar a los que no sobresalen, sino tratarlos con igualdad.
Significa comprender que el campeonato no comienza si se está solo, y que incluso en nuestra sociedad sólo se puede salvar juntos, mientras que se pierde si se deja de lado a los que son más débiles y se sienten como un descarte".
"Esta mentalidad solidaria, que queremos que crezca dentro de nosotros, en nuestros círculos y en nuestro mundo, contribuirá a la revolución en el cambio cultural que esperamos", afirmó.
Francisco instó a que la humanidad trabaje unida con espíritu de equipo. Esto es "cuando fomenta la creación de campos sin barreras, luchando por superar todos los muros que injustamente dividen a las personas y promueve la participación y la acogida de todos, de acuerdo con un espíritu de equipo que es la verdadera esperanza de la humanidad".
Objetivos para ser mejores
Asimismo, invitó a descubrir los verdaderos objetivos en la vida para ser mejores personas, ante 120 deportistas, miembros de la Liga Nacional Italiana de Aficionados.
En este sentido, invitó jugar limpio en la vida, a ser correctos y leales, vivir intensamente y tener un gran respeto por el adversario.
Y para esto se necesita un buen dominio de sí, explicó Francisco, dominio que se adquiere con un entrenamiento interior y el cuidado de la vida espiritual.
El día anterior, en la Plaza de San Pedro, abriendo los ritos de Semana Santa, había pedido a los jóvenes del mundo dirigir su mirada hacia la Cruz de Cristo, expresión del triunfo de la humildad, sobre el triunfalismo del mal que busca la visibilidad 'mediática'.