Henrique tuvo una educación comunista pero… Henrique creció diciendo que nunca creería en Dios. Tenía la idea de Jesucristo era el primer comunista de la historia… y el cristianismo una superstición anticuada.
Pero conoció a una chica que le enamoró y le fue haciendo cambiar su manera de ver la realidad, por la alegría genuina y contagiosa de sus amigos cristianos, recuerda en el video-testimonio De comunista a cristiano: la historia de Henrique.
Sin embargo ella cortó la relación. Y el joven pasó por algunas decepciones relacionadas con sus estudios. Quería cambiar el mundo, y pensó que nunca podría ser feliz, si había gente que no lo era. Un día en que su angustia llegó a la desesperación, entró en una iglesia y todo cambió.
“Allí por primera vez, me encontré solo cara a cara con Jesús -recuerda-. Toda la tristeza fue disipada por Dios presente en el Sagrario. ¡Me estaba convirtiendo y no sabía cómo explicar este misterioso fenómeno!”. Hoy recuerda el día de su Bautismo como el más feliz de su vida.
Con información de Opusdei.org