Cientos de artesanos de la ciudad de Areguá, Paraguay, llenan las calles de arte y color con la exposición de belenes hechos de cerámica. Entre ellos, se destaca un “pesebre nativo”, pieza de arte religioso que busca concienciar sobre el legado de los indígenas. Para las familias aragüeñas el arte que da forma a pesebres y otras figuras de cerámica no solo representa el sustento para sus hogares, sino también, es una actividad que los une a sus seres queridos.
El alfarero José Centeno, más conocido como Chito, oriundo de Areguá, trabaja con toda su familia en la fabricación de artesanías. Entre sus piezas más destacadas se encuentra un “pesebre nativo”, que según expresa el artista, es el “único en el mundo”.
El “pesebre nativo” cuenta con piezas de cerámicas que representan a Jesús, María y José con rasgos nativos. El belén está rodeado de animales autóctonos del Chaco paraguayo como el jacaré, la tortuga y el tatú bolita (Tolypeutesmatacus), muchos de ellos en peligro de extinción.
Chito Centeno explicó a Aleteia que a través del pesebre nativo se busca revalorizar el legado de los indígenas y destacar la importancia de los recursos naturales propios del Paraguay. “Los nativos solo disponían de los recursos naturales que necesitaban para subsistir”, destacó.
El artesano comentó que trabaja en la alfarería rodeado de toda su familia. Su esposa, sus tres hijas y su hijo, contribuyen en la fabricación y ventas de las piezas confeccionadas en un taller familiar.
“Es maravilloso trabajar con la familia. El arte nos une y nos fortalece como familia. Aprendemos y crecemos juntos. Este es un legado que se transmite de generación en generación”, destacó.
El “pesebre nativo” es una de las estrellas de la tradicional exposición de belenes que realizan los artesanos de Areguá todos los años. El mismo está a la venta y tiene un costo de unos 1.000 Euros (G. 7.000.000 aproximadamente).
Más imágenes aquí (hacer click en galería):
Una tradición que involucra a toda una ciudad
La ciudad de Areguá cuenta con una exposición permanente de artesanías. Cuadros, figuras de santos, pesebres, alcancías, atrapasueños, ánforas, entre otros, forman parte de los coloridos trabajos expuestos en esta localidad.
Ante la llegada de la Navidad, es tradicional la exposición de pesebres de diversos tamaños y alegorías. Las familias paraguayas acostumbran armar el belén, tras la Solemnidad de la Virgen de Caacupé, que se celebra el 8 de diciembre.
Los artesanos de Areguá, en su mayoría, cuentan con talleres familiares. Esta actividad une a cientos de personas que encuentran en el arte el sustento para sus hogares. Otra de las actividades que mueve la economía aragüeña producción y venta de frutillas (fresa).
Areguá es una ciudad que se sitúa a 28 kilómetros de Asunción y es la Capital de Departamento Central, Paraguay. Esta ciudad es conocida como la cuna de la artesanía y está rodeada por el Lago Ypacaraí.
La ciudad surgió como parte de una colonia franciscana y fue fundada por el conquistador español Domingo Martínez de Irala. Está asentada sobre una antigua comunidad indígena.
Areguá es una ciudad que se destaca por la cultura y las exposiciones de arte. Las casas conservan, en su mayoría, sus fachadas coloniales. Una de las edificaciones más bonitas de esta ciudad es su Iglesia, construida en honor a la Virgen de la Candelaria, en 1862.
El nombre de la ciudad Areguá tiene origen en sus primitivos pobladores, los Mbya Guaraní. Este grupo, que habitaba la zona antes de la colonización española, eran conocidos como los “Ariguá”, que significa “los de arriba”. La región es considerada una de las más altas del Paraguay.
Te puede interesar:
Betty, la colombiana que conserva más de 600 pesebres en su casa
Te puede interesar:
América Latina y sus pesebres asombrosos
Te puede interesar:
Los pesebres más originales del mundo (Fotografías)