Cuando la muerte te devuelve a la vida
Cuando Laura Montesinos puso nombre a su blog y cuenta de Instagram, “Viajar entre líneas”, no podía imaginar cuánto sentido cobrarían para ella esas tres palabras poco tiempo después.
Hace menos de dos años, sufrió el golpe más doloroso de su vida. Tenía 32 años y una vida por delante que recorrería a partir de aquel día con una ausencia, la de su marido. Una muerte súbita se lo llevó y Laura emprendió un nuevo viaje, el de la vida real. Cuenta con una acompañante, su hija que por aquel entonces tenía dos años.
Nunca había hablado con alguien tan convencido de la vida eterna como Laura. Su voz es dulce pero firme al mismo tiempo. Asegura que desde aquel día tiene mucha paz porque vive “abandonada a la voluntad de Dios” porque “sé que el Señor tenía esto preparado para mí”.
Laura no vive en las nubes. “Por supuesto me duele en el alma que mi marido no esté conmigo”, afirma al tiempo que inspira por su madurez y actitud ante la vida.
Laura no niega el dolor que le ha producido la muerte del que, dice, ha sido lo mejor de su vida, ni la soledad que siente al meterse en la cama pero tiene claro que las cosas no ocurren por casualidad y que de las desgracias más profundas se pueden obtener maravillas.
“Se puede dar sentido al sufrimiento” porque en su caso, “aunque suene de locos”, el sufrimiento ha cambiado su vida a mejor.
Palabras que van más allá
Su paso por la red social de moda no deja indiferente a quien la sigue. En un medio en el que cada vez encontramos más y más cuentas transmisoras de grandes valores, Laura destaca por la emotividad y sinceridad de sus textos.
Con sus publicaciones, Laura transmite el profundo sentido de la trascendencia en una red social como Instagram donde, según dice “hay mucha hipocresía. La gente se centra y busca lo que la sociedad le dicta y se olvida de que en la vida debemos labrarnos el camino para lo que viene después.”
Y precisamente, para hablar de lo que viene después y de cómo aprovechar realmente la vida, Laura decidió cambiar el rumbo de su cuenta y compartir sus pensamientos. Sintió que así debía hacerlo.
Laura no es sólo un ejemplo de superación, si no ejemplo de fe, de aceptación y entrega a la voluntad de Dios. Porque como ella misma dice “la muerte es la puerta de la vida”, la muerte no es el final.
En esta galería compartimos algunos de sus pensamientos y fotografías con la esperanza de que te inspiren: