La capital de un gigante sudamericano (Brasil), la única ciudad construida en el Siglo XX y declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco Sucedió el 30 de agosto de 1883. En aquel momento Don Bosco tuvo un sueño misionero –de esos famosos y reveladores que solía tener el santo- vinculado a la labor evangelizadora de sus hijos. Fue ahí, ente los lugares donde habría que trabajar, donde vio a Brasilia.
“Entre los 15º y 20º grados había un seno muy ancho y muy largo que partía desde un punto formando un lago. Entonces una voz dijo repetidamente: Cuando vengan a cavar las minas escondidas entre estos montes, aparecerá aquí la tierra prometida, corriente de leche y miel. ¡Será una riqueza inconcebible! (MB XVI, 390)”, recuerda la edición del Boletín Salesiano cuando la capital de Brasil cumplió 50 años.
“Así, se construye la primera casa salesiana en ese mismo año, una pequeña capilla, llamada «Ermida Dom Bosco». La ciudad de Brasilia, fue inagurada varios años después, el 21 de abril de 1960. Ya era una realidad, junto con la fuerte presencia salesiana”, añade el Boletín.
Es por todo esto que se dice que Brasilia es una ciudad muy ligada a Don Bosco y a los salesianos. Incluso, el expresidente de Estados Unidos Barack Obama citó ese sueño en un discurso para empresarios en 2011 cuando estuvo de visita por el país.
Este 21 de abril se cumplieron los 60 años de una ciudad que guarda muchísimas curiosidades, entre otras, ser la única construida en el Siglo XX, además de haber sido diseñada con forma de avión.
Declarada Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad por la Unesco en 1987, esta ciudad sigue sorprendiendo por el recuerdo del trabajo del arquitecto Oscar Niemeyer para que pudiera asentarse la nueva capital de Brasil y de esa manera dejar atrás el vejo legado colonial dado por Río de Janeiro o Salvador de Bahía.
Con Brasilia, más adaptada para los automóviles que para los peatones, se intentó simbolizar la integración del Brasil más profundo, dejando a un lado la primacía costera.
Pero en Brasilia persisten más atractivos, entre ellos el lago artificial llamado Paranoá, la Plaza de los Tres Poderes o propio y magnánimo Santuario de Don Bosco, una de las más conocidas iglesias del lugar y con todo lo que ello representa.
A continuación más imágenes y videos para seguir disfrutando de los 60 años de Brasilia, la ciudad que soñó Don Bosco:
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