Sucedió en los últimos 50 años y se ha transformado en un dato que merece reflexión ‘Retroceso glaciar en el Perú 1948-2019, impactos en el recurso hídrico’. Así se denominó la conferencia virtual en la cual se informó sobre el impacto del cambio climático en el país andino.
“Perú perdió el 51% de su superficie glaciar, en los últimos 50 años”, fueron los datos que se manejaron desde el Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) y a través de la Autoridad Nacional del Agua (ANA).
En los últimos 50 años, el país ha perdido 51% de su superficie glaciar, sin embargo, existen acciones que pueden favorecer a los glaciares: la reforestación, reducir la contaminación en las ciudades, etc.#CuídameAntesQueSeaTarde
Conoce más información▶ https://t.co/OG2ubkKD6g pic.twitter.com/E3WVt8hk28
— ANA Perú (@ANAPeru) July 5, 2020
Es que, tal cual se recuerda en este informe, el aumento de la temperatura ha estado generando retroceso en los glaciares y en Perú actualmente se contabilizan 18 cordilleras nevadas (Blanca, Huallanca, Huayhuash, Raura, Huagoruncho, La Viuda, Central, Huaytapallana, Chonta, Ampato, Urubamba, Vilcabamba, Huanzo, Chila, La Raya, Vilcanota, Carabaya y Apolobamba), siendo que años atrás se contabilizaban 20 (se extinguieron las cordilleras Barroso y Volcánica).
En ese sentido, se prosigue, el pronóstico sobre sobre Chila, La Raya, Huanzo, Chonta y La Viuda no es para nada alentador, pues ya perdieron el 90% de su superficie glaciar-
La información, difundida en los últimos días (ver nota completa aquí), genera preocupación y llama a la reflexión, pues detrás de estos ecosistemas sensibles al cambio climático también se encuentra todo lo vinculado al rol que juega el hombre y las acciones que ayudan a acelerar estos procesos.
“El clima como bien común”
Entre los puntos 23 y 42 de la encíclica Laudato Sí, sobre el cuidado de la “casa común”, surgen varias cuestiones que el papa Francisco pone sobre la mesa y que hacen énfasis en los aspectos vinculados al cambio climático, la cuestión del agua y hasta la pérdida de biodiversidad. Es ahí donde también de alguna manera aparecen los glaciares.
En cuanto al calentamiento del sistema climático y algunos efectos se reflexiona:
“La humanidad está llamada a tomar conciencia de la necesidad de realizar cambios de estilos de vida, de producción y de consumo, para combatir este calentamiento o, al menos, las causas humanas que lo producen o acentúan” (23).
Pero también se lo considera con un verdadero problema global con múltiples dimensiones, por ende, uno de los grandes desafíos para la humanidad.
“Es necesario invertir mucho más en investigación para entender mejor el comportamiento de los ecosistemas y analizar adecuadamente las diversas variables de impacto de cualquier modificación importante del ambiente. Porque todas las criaturas están conectadas, cada una debe ser valorada con afecto y admiración, y todos los seres nos necesitamos unos a otros. Cada territorio tiene una responsabilidad en el cuidado de esta familia, por lo cual debería hacer un cuidadoso inventario de las especies que alberga en orden a desarrollar programas y estrategias de protección, cuidando con especial preocupación a las especies en vías de extinción” (42).
He aquí la necesidad de seguir haciendo referencia a todos estos temas, a no dejarse de sorprender cuando se anuncia que estas maravillas de la creación, como son los glaciares, se siguen extinguiendo y el deterioro avanza. Por ende, a buscar los caminos que logren darle respuesta a todo esto como la reforestación, reducción de la contaminación en ciudades, etcétera.
Te puede interesar:
Venezuela: primer país del mundo en quedarse sin glaciares
Te puede interesar:
Cambio climático vs glaciares de Ecuador: Dos de siete están amenazados
Te puede interesar:
¿Cómo quedaría el mundo si desaparecen los glaciares?