Cerca de famosos observatorios está presente una de las devociones marianas más antiguas del país sudamericano. El norte chileno fue un lugar privilegiado para observar el eclipse total de sol que ocurrió el 2 de julio del 2019. La región de Coquimbo, ubicada al norte de Santiago y que es posible llegar en automóvil en solo 3 horas, ha sido el sitio donde tuvo la mayor visibilidad. Este fenómeno astronómico formó una franja de 150 kilómetros de oscuridad y pasó sobre los observatorios La Silla, Gemini y Tololo en aquella oportunidad.
A 500 kilómetros de este observatorio se encuentra la pequeña localidad de Andacollo, donde se lleva a cabo una de las devociones marianas más antiguas de Chile, se trata de la Virgen de Andacollo, en quechua (lengua indígena) se denomina Anta –Coya que significa “cobre-reina”. Esta devoción comienza en 1560, solo 20 años después de la consolidación del descubrimiento de Chile.
Te puede interesar:
Chile: 5 lugares para disfrutar en familia y cultivar el espíritu
Manuel Concha en su libro “Tradiciones Serenenses” relató el inicio de esta devoción:
“Cierta noche, un indio viejo dormía, con aquel sueño pesado del que ha trabajado sin descanso durante el día. Cuando notó que la mina se había iluminado súbitamente, y que la luz aumentaba en intensidad. Que parecía el foco de aquella clara y dulce luz, principió a cambiar de forma, a tomar consistencia material, a delinearse algo que parecía un objeto flotante, una cosa impalpable.
El indio, oyó una voz que le dijo:
“Existe una gran riqueza a pocos pasos de ti. Busca entre los peñascos más altos que se encuentran en la planicie que se extiende sobre tu cabeza. ¡Anda Collo!”
A la noche siguiente, se volvió a renovar la visión, y la misma voz dijo: “Tuyas serán las riquezas. ¡Anda, anda, Collo!”
El indio partió, en compañía de algunos familiares, y entre algunos matorrales apareció, medio oculta, una pequeña estatua de madera toscamente labrada, de tez morena de gracioso rostro”.
Después del hallazgo, el indio se lleva la imagen a su choza y comienza a rendirle culto a través de danzas, muy propias de la cultura indígena.
La fiesta de la Virgen de Andacollo, suele reunir más de 300 mil peregrinos de Chile, y se celebra el primer domingo de octubre y el 26 de diciembre de cada año. Bailes religiosos, Eucaristías, peregrinaciones se viven durante esos días en esta pequeña localidad rindiéndole culto a la Virgen María. Claro está, todo esto hasta antes de la pandemia del coronavirus. Pero valía la pena volver a recordar la particularidad y la fiesta en este lugar.
Mira la galería de imágenes
Te puede interesar:
Virgen de La Tirana, la imponente fiesta del norte de Chile en imágenes